Después de infinidad de especulaciones entorno a una supuesta fiesta que prepara Salma Hayek por su enlace con Francois-Henri Pinault, la actriz y productora mexicana ha salido al paso de los rumores y ha asegurado que considera ridículo gastarse millones de dólares en una boda. "Creo que una boda se trata de amor, amigos, familia y diversión", comenta Hayek, de 42 años, a la revista People. "Gastar millones de dólares en una boda es ridículo y nunca ha sido mi sueño. Nunca lo haría", confesó la actriz.
Según contaba la rumorología, la pareja contraería matrimonio por la iglesia el 24 de abril en la catedral de Notre-Dame y los invitados serían trasladados a la ciudad luz en aviones privados y hospedados en el hotel Ritz, uno de los más caros del mundo. A su vez, aseguraban que llegarían en procesión por el Río Senna, desde la Torre Eiffel hasta llegar a la Catedral donde los invitados llegarían en barcos y limousinas flotantes. Sin embargo y a tenor de las declaraciones de Salma, entre sus planes no está el de realizar una ostentosa celebración.
Salma Hayek, de 41 años, y Francois-Henri Pinault, de 46, contrajeron matrimonio el pasado 14 de febrero en el ayuntamiento de París y tuvieron a su hija, Valentina Paloma, que tiene un año y medio.
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