Bastan unos cuantos rayos de sol para que en algunos cutis se multipliquen las pequitas por todo el rostro. La mejor forma de combatirlas es no empeñarse en cubrirlas a toda costa, una misión condenada al fracaso a no ser que esté dispuesta a llevar capas y capas de maquillaje de camuflaje, dando al rostro un aspecto totalmente artificial. Es preferible usar una base muy suave y ligera para unificar el color de la tez, pero dejando traslucir la calidad natural del cutis.
Como explica el maquillador Alberto Esteban, "es importantísimo usar una base de maquillaje ligera del mismo tono de la piel. Si es más oscura, sólo se consigue que las pecas parezcan más visibles y notorias". Y otro truco profesional para disimularlas: "los coloretes en polvo son preferibles a las fórmulas en crema, que resaltan más las manchas".
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