Raquel Perera se ha enamorado este verano… de Mykonos. La isla griega la ha conquistado con su mar azul intenso, sus tabernas junto al agua, sus calles encaladas que dibujan un laberinto y esos atardeceres mágicos con los icónicos molinos como telón de fondo. "La relación más silenciosa pero la más profunda puede que esté en el ruido de un verano donde se observa sin juzgar", ha escrito junto a varias imágenes en las que se la ve disfrutando de unas vacaciones tranquilas y llenas de encanto.
Por lo que deja entrever en sus publicaciones, parece que ha viajado sola a este rincón único del Egeo. Sin pareja conocida desde 2023, cuando puso fin a su relación con Miguel Such, la coach ha decidido volcarse en sí misma y en disfrutar de la soltería, siempre acompañada de personas especiales: sus dos hijos, Dylan y Alma, fruto de su matrimonio con Alejandro Sanz, y sus grandes amigas, como Sara Carbonero, con quien compartió unas inolvidables vacaciones en Cádiz el pasado mes de julio.
Como experta en desarrollo personal, Raquel contó en Zapeando, programa en el que colabora habitualmente, que las vacaciones no siempre son sinónimo de descanso. Las altas expectativas y la convivencia intensa, especialmente con niños, pueden convertir estos días en una fuente de tensión. Por eso, recomienda afrontar este tiempo con una actitud positiva, clave para crear un ambiente relajado y disfrutar de la compañía. Y precisamente con esa filosofía ha vivido su escapada a Mykonos, donde se ha dejado ver más radiante que nunca, posando así de sensual en bikini entre aguas turquesa y paisajes de postal.
Durante sus vacaciones griegas, Raquel ha disfrutado de una desconexión total entre aguas turquesa, paseos por calles encaladas y atardeceres de postal. Un verano para recargar energías, saborear cada instante y regresar con la certeza de que, a veces, las mejores escapadas son las que se viven sin prisas… y en la mejor compañía: una misma.
Atrás quedan ya los amargos momentos provocados por las declaraciones de Ivet Playà sobre Alejandro Sanz. Una polémica que la coach, como exmujer del artista y madre de sus dos hijos pequeños, afrontó desde un discreto segundo plano, pero mostrándole su apoyo incondicional. A pesar de su divorcio, siempre serán familia, como demostraron el pasado 21 de junio durante la Primera Comunión de Dylan y Alma, de 13 y 10 años.