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Nombrar a Paulo Futre es hablar de fútbol con mayúsculas. Fue una de las figuras clave del deporte en las décadas de los 80 y 90, en las que se convirtió en un ídolo internacional gracias a su paso por el Atlético de Madrid, el FC Porto, el Olympique de Marsella y el AC Milan, entre otros equipos. El éxito también lo ha acompañado en el ámbito personal, ya que es un orgulloso padre de dos hijos, nacidos durante su matrimonio con Isabel Pinto: Paulo Jr y Fábio. Ambos han seguido sus pasos deportivos, pero el primero desde otra perspectiva. Es un joven polifacético dedicado a la tecnología deportiva, el arte, la docencia y los fondos de inversión. Una apasionante vida de la que él mismo ha compartido todos los detalles.
© @futremendoNacido el 13 de abril de 1989, Paulo Jorge Pinto Futre siempre destacó por su gran inquietud. Mostró interés en el deporte, pero también por jugar al ajedrez, tocar instrumentos, explorar idiomas de forma autodidacta... Tenía mil hobbies y aprendía movido por la curiosidad, circunstancias que hicieron que fuese identificado como un niño con altas capacidades al estar por encima del percentil 98 de la población. "No salió futbolista, sino futbolisto", suele decir con sentido del humor su padre, que rechazó la posibilidad de que le adelantaran de curso para que no tuviera más atención de la que ya recibía por ser hijo de una estrella.
Siempre se ha mantenido en un segundo plano, pero la tarde de este miércoles ha visitado Y ahora Sonsoles. Paulo, que ha confesado estar nervioso en sus primeros segundos en el plató, ha explicado que da el paso al frente para "acabar con los prejuicios y desmitificar la realidad de tener altas capacidades, porque es una cualidad más, no tiene ningún mérito". Ha comentado que forma parte de MENSA, la asociación de personas con alto coeficiente intelectual más antigua y extensa del mundo. Entró en este grupo por recomendación de su psicóloga y no puede sentirse más afortunado de poder conocer a tantas personas con puntos comunes con él.
© @futremendoPaulo Jorge dos Santos siempre ha tenido una relación muy cercana con su padre, que es a la vez su confesor, su consejero y un apoyo incondicional: "He tenido suerte de tener un padre que me quiere, que me ha enseñado buenos valores, que me ha dado una buena vida y como extra fue un gran futbolista. Pero no cambiaria nada de lo que está más arriba por lo que está más abajo". El jugador le dio su primera gran oportunidad al incluirlo en los negocios familiares con solo 14 años. En la adolescencia acompañó a Futre a reuniones por todo el mundo con grandes magnates del futbol y participó en millonarias negociaciones.
© @futremendoGraduado en Diseño y Bellas Artes en la Universidad Francisco de Vitoria, obtuvo el premio al mejor expediente académico y matrícula de honor en el TFG. Posteriormente estudió Comunicación y Ventas en el Instituto Superior de Arte. Además, habla castellano, inglés, portugués, francés, italiano, finés y esperanto. El mundo de la docencia lo sigue viviendo de cerca como profesor invitado en IE Business University, UAX Rafa Nadal o la Escuela Universitaria del Real Madrid, además de tener un pódcast en el que entrevista a catedráticos de diferentes disciplinas.
Laboralmente tiene muchos frentes abiertos. Por un lado, es artista contemporáneo y ha retratado a numerosos rostros conocidos como Antonio Banderas, Fernando Torres, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, o el alcalde de Madrid, José Luis Martinez-Almeida. Además, fue bajista de una banda rock y, como contaba en Marca, es advisor e inversor de startups, colabora con fondos de inversión y asesora a futbolistas en sus inversiones.
© @futremendoLa vida actual de Paulo Futre
Aunque el fútbol sigue formando parte de su vida y ha trabajado como comentarista deportivo tras colgar las botas, Paulo Futre también ha explorado otros ámbitos como la interpretación. En 2022 debutó como actor en una serie llamada Rua das Flores, un desafío del que él mismo habló emocionado: "Participar en una telenovela siempre ha sido un sueño desde niño que estoy cumpliendo a los 56 años". De pequeño veía telenovelas y fantaseaba con poder formar "parte de esa magia", por eso cuando le ofrecieron incorporarse al proyecto le resultó "imposible decir que no" y lo asumió "con la misma ilusión y energía que sentí cuando empecé a jugar al fútbol”. Escasos meses después de llegar esta oportunidad, sufrió un infarto durante el funeral de su madre, pero todo quedó en un susto y pudo seguir adelante con sus proyectos.
