Rafael Nadal es el tenista que más veces ha ganado un mismo Grand Slam en toda la historia de Roland Garros con nada más y nada menos que 14 títulos. Este año, por primera vez desde 2005, el deportista no estará en el cuadro principal del torneo parisino, por eso, le rendirán el homenaje que merece el próximo domingo 25 de mayo, en una ceremonia especial dedicada al rey de la tierra batida. Porque Roland Garros no solo representa un hito del tenista mallorquín en la memoria colectiva; también ha sido el escenario de los triunfos personales de Nadal, los que se graban a fuego en la retina y en el corazón y que no se pueden entender sin su familia.
Su primera cita con Roland Garros
2005 fue el año en el que Nadal se alzó con la victoria en el Abierto de Francia, y nos dejó como recuerdo estas imágenes abrazando el trofeo, tras doblegar a Roger Federer en semifinales y a Mariano Puerta en la gran final.
Con 19 primaveras recién cumplidas, ese año fue también el de la buena suerte en el terreno sentimental, ya que ese verano le vimos por primera vez con Mery Perelló, su novia entonces. Las imágenes dieron la vuelta al mundo, a pesar de que ella se ha mantenido siempre en un segundo plano, apoyando a su pareja en la sombra pero, desde ese momento, la presencia de Mery es una constante en las citas trascendentales de su compañero de vida.
Amor en las gradas del torneo parisino
A pesar de la discreción de la pareja cuando está en público, uno de los instantes más emotivos de la final de Roland Garros en 2020 fue cuando el tenista se acercó a las gradas para fundirse en un cariñoso beso con la persona que celebra las victorias y le apoya en las derrotas desde aquel 2005. El campeón y la ya mujer del tenista -contrajeron matrimonio en octubre de 2019, sellando así 14 años de amor-, bajaron sus mascarillas para besarse, a pesar de estar en plena pandemia.
Mery Perelló ha vivido al lado de Rafa toda su carrera profesional, siendo testigo directo de sus éxitos y sus fracasos, y no puede evitar la emoción en las gradas ante su victoria, celebrando con gestos naturales de tensión y euforia, situación que se ha repetido varias veces a lo largo de estos 20 años.
Su hijo en el último Roland Garros
En junio de 2022, Rafa Nadal (38) disputó, por última vez, la final de Roland Garros ante la presencia del rey Felipe VI. Su ensaladera número 14 fue el mejor regalo para él -que además celebraba su 36 cumpleaños- y para toda su familia, que le acompañaba como tantas otras veces. Sus padres, su hermana y su mujer (36) le animaban con emoción desbordante, pero ese día el tenista celebraba otro momento único: tener a su hijo Rafael acompañándole desde las gradas, viendo a su padre competir por primera vez en París, en lo que sería su último torneo en la ciudad de la luz y el amor.
Retirado de las pistas desde la final de la Copa Davis de 2024, Roland Garros no es solo un torneo especial en el haber del mejor tenista de todos los tiempos. Es también un recuerdo de los mejores momentos personales de Rafa Nadal, recogidos en imágenes y en recortes de prensa, que hoy rinde homenaje desde sus gradas a esta leyenda viva del deporte de élite internacional.