Javier Rigau, junto al hijo y nieto de Gina Lollobrigida, preside la capilla ardiente por la actriz

La artista italiana y el empresario catalán mantuvieron una controvertida relación sentimental y en 2019 consiguieron la nulidad matrimonial

Por Marina Ortiz Cortés

Ya está abierta la capilla ardiente de Gina Lollobrigida, que fallecía el pasado 16 de enero a los 95 años. El pueblo italiano podrá despedirse de la actriz en la Sala della Protomoteca del palacio del Campidoglio, sede del ayuntamiento en Roma, hasta el jueves 19 de enero, cuando tendrá lugar el funeral. El ataúd, de manera clara, reposa sobre un altar de terciopelo granate y permanece custodiado en sus esquinas por ramos de Anthurium en color blanco o rojo y sobre el féretro grandes ramos de rosas rojas. Con la apertura de la sala, el que fuera su marido Javier Rigau, junto a su hijo Andrea Milko Skofic y el nieto de la fallecida, Dimitri Skofic, se han sentado juntos.

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Javer Rigau ya había hecho público el martes que había hablado con Gina unos días antes de su fallecimiento para despedirse, y que había estado alojado en un hotel a pocos metros de la clínica desde entonces. "Me quedaré con Milko (su hijo) y Dimitri (su nieto) para organizar el funeral, donde yo, como marido, estaré en primera fila", declaraba el empresario catalán, a pesar de que la polémica ha rodeado a la pareja desde que se conocen. La diferencia de edad de 34 años había sido un factor, pero su relación dio un giro drástico cuando la intérprete denunció a su marido en 2016 acusándole de querer estafarla para poder tener acceso a sus bienes. 

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En febrero de 2019 Gina Lollobrigida logró la nulidad matrimonial, a pesar de que los juzgados le dieron la razón a Javier Rigau, y la actriz calificó la relación como "el peor error de su vida". Sin embargo, el empresario catalán todavía tiene buenos recuerdos de la que fuera su esposa y no ha querido faltar en la despedida. 

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Pero Javier Rigau no es el único hombre de quien Gina había hablado mal y que se ha sentado en la primera fila de la capilla ardiente. También había criticado a su hijo, de 65 años, y le había acusado de querer aprovecharse de ella: "Solo quiere dinero. Quiere la herencia. No lo quiero ver más". "Era una mujer independiente que se hizo a sí misma. Tenía un carácter muy fuerte y siguió su propio camino en un momento en que las mujeres no tenían tanta autonomía", ha asegurado Andrea en la puerta de la capilla ardiente. 

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Junto al que fuera el marido de Gina Lollobrigida, con su hijo y su nieto, también han estado el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, y Chiara Sbarigiqa, la presidenta de Cinecittà (complejo de estudios de cine en la parte oriental de la capital italiana). La subsecretaria de cultura, Lucia Borgonzoni, y Tiziana Rocca, organizadora de  eventos para la actriz también han sido de los primeros en presentar sus respetos a la fallecida actriz. 

Cientos de ciudadanos han pasado por la capilla ardiente para despedirse de Gina Lollobrigida, entre ellos algunos representantes de la Asociación Nacional de Bersaglieri. Los miembros de este cuerpo de infantería del Ejército italiano dejaron junto al féretro el característico sombrero de plumas de su unidad, ya que a la actriz se la conocía comúnmente como "la bersagliera". "La conocimos y nos hubiera gustado haberla tenido durante más tiempo. La recordaremos", han asegurado. 

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No será enterrada en Roma

La capilla ardiente ha permanecido abierta el miércoles entre las 10 y las 19 horas y el jueves cerrará a las 11.30 horas. Entonces se celebrará el funeral por la diva italiana a las 12.30 en la Iglesia de los Artistas en la Piazza del Popolo en Roma, tras lo que será trasladada a su ciudad natal. Gina Lollobrigida expresó en el año 2000 su voluntad de ser enterrada en Subiaco, que se encuentra a unos 70 kilómetros de Roma, donde está teniendo lugar la capilla ardiente. La ciudad preparó un panteón tras su petición pública pero el monumento está actualmente en fase de restauración. Debido a estas obras, su entierro será temporalmente en otro nicho y después será trasladada al lugar originalmente planeado para su eterno descanso. El alcalde de la ciudad, además, ha propuesto poner el nombre de la fallecida intérprete a una plaza cercana al teatro donde comenzó su carrera.