El sobrecogedor testimonio de Ana María Aldón tras someterse a una regresión hipnótica realmente impactante

La colaboradora de 'Fiesta' se ha derrumbado al 'revivir' los episodios más dramáticos de su vida

Por Gtresonline

Ana María Aldón ha vivido, sin duda, uno de los momentos más duros de su vida. En el programa donde colabora, Fiesta, la ex de Ortega Cano se ha sometido a una regresión hipnótica en la que ha rememorado experiencias del pasado, cuya sesión ha durado una hora y media. La de Sanlúcar de Barrameda ha revivido los dramas desde era una niña, empezando por la mala relación con su padre, hasta la soledad que sintió cuando dio a luz a sus dos hijos, Gema y José María. Antes de ver las sobrecogedoras imágenes de la regresión en sí, Ana María ha especificado lo siguiente: "Lo he vivido con la misma intensidad y el mismo dolor físico, es lo que más me ha impactado. Recuerdo el dolor, la sangre, como latigazos y ese dolor que te escuece es lo que he sentido", expresaba en Fiesta, añadiendo que tenía "situaciones" que no podía "olvidar".

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El maltrato de su padre

Uno de los peores momentos que ha revivido Ana María Aldón ha sido su infancia con su padre, un tema del que siempre ha evitado hablar, hasta el día de hoy. Sí que había contado que "tenía un carácter autoritario", pero nunca había detallado cómo se comportaba con ella y su madre. Por primera vez, la gaditana ha revelado su nombre, "Manuel", y ha desvelado con todo detalle que su progenitor no solo le pegaba a ella y a su madre, sino también a sus hermanos. Tras ver las imágenes de la regresión con las que se ha derrumbado en directo -en las que pedía que su padre dejase de torturar a su familia porque "no nos merecemos lo que vivimos" y en las que al final lograba perdonarle-, ha querido compartir uno de los instantes "con más agresividad" por parte de él hacia su madre: cuando jugaba dentro de su camión. "La protección era meterse debajo del colchón, cada uno corría para un lado y eso no lo he hablado con mis hermanos porque es doloroso. Con uno de mis hermanos hablo más, siempre estábamos juntos es esos momentos, pero él lo ha superado y a mí me arrastra", explicaba con tristeza. 

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Además, ha recordado que con 18 años llamó a la policía para denunciar a su padre: "Me siento bien de haberlo hecho. Nadie lo había hecho". Pero a pesar del dolor que aún guarda en su corazón, ha querido echar un capote a su padre diciendo lo siguiente: "Tengo que decir algo y es muy importante. Yo fui niña y sufrí esas consecuencias de otro niño, que con seis meses se quedó huérfano. A su padre le fusilan en la guerra. Mi padre sufrió unas consecuencias muy duras. No quiero justificarle, pero intento comprenderle".

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El nacimiento de Gema Aldón

A sus 17 años, Ana María Aldón daba a luz a su primera hija, Gema. Durante la hipnosis recuerda que ella se encontraba sola en el hospital y que su familia no fue a verla en la primera noche. "A mi madre le hubiera gustado estar a mi lado, pero mi padre vivía, entonces no le era posible ir", explicaba tras ver las imágenes. Además, la colaboradora ha desvelado el sufrimiento que pasó con su hija: "La niña no venía y me dijo la doctora que tenía un problema de corazón, y no sabía si iba a sobrevivir. Yo me derrumbé", explicaba. También ha asegurado que estos detalles del nacimiento, la propia Gema lo desconoce, ya que no ha visto el momento adecuado para sentarse con ella a contárselo.

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Su hijo con José Ortega Cano

Otro momento de su vida por el que ha buceado ha sido el nacimiento de su segundo hijo, José María, fruto del amor con José Ortega Cano. De nuevo, Ana María ha expresado la soledad que sintió en aquella etapa en la que el torero se encontraba en la cárcel de Zaragoza. "Era verme sola otra vez. Nada era lo mismo, pero sí me volvía a ver sola con otra criatura", señalaba, matizando que en la regresión no habla del instante del parto, sino de lo que vivió después. "Mi hija se vino los tres primeros meses porque yo se lo pedí. Por aquellos momentos yo estaba encerrada. Huía de la prensa, intentaba evitar todo lo posible", argumentaba, añadiendo que, "la situación de verme de nuevo sola con otro hijo fue una sensación horrorosa".