Adriana Abascal nos presenta a su hija Jimena, su sucesora en la moda que acaba de cumplir 15 años

©VALERO RIOJA

“Cuando Jimena se marche de casa, ahí si me dará algo”, confiesa Adriana en la revista ¡HOLA! de esta semana donde posa por primera vez junto a su “pequeña”. Y es que sus dos hijos mayores ya están estudiando fuera. Paulina, estudia en la Universidad de Berkeley, en San Francisco, y Diego, que acaba de graduarse con muy buenas nochas del bachillerato, comenzará sus estudios superiores en Los Ángeles, donde asistirá a la universidad USC (Universidad del Sur de California), una de las mejores en finanzas y estudios.

Siempre dispuesta a ayudar a todo el mundo y muy resolutiva, parece que Jimena se quedará por el momento al lado de su madre, a la que suele acompañar en muchos de sus viajes y a la que admira por su positivismo y fortaleza. Hablamos con ella, sobre su día a día, sus pasiones y sus planes de futuro al cumplir quince años.

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—¿Qué te ha parecido formar parte de este reportaje?

—No conocía Menorca. Me encantó. Binibeca es un pequeño pueblo de pescadores al sur de Mahon. Ha sido una experiencia muy bonita. El equipo, superdivertido y había muy buen ambiente.

—¿Te gusta el mundo de la moda?

—Me encanta. Me gustaría estudiar en Pennighen, una universidad de diseño, comunicación y dirección artística.

—El otro interés que te une a tu madre es el arte

—Sí, y también me gusta mucho toda la parte digital de la moda; más que el diseño. El día de mañana me gustaría añadirle algo de valor a Skorpios, porque lo siento como algo mío. Desde el primer día he estado aprendiendo, ayudando y, sobre la parte del negocio, me interesan mucho el diseño, las producciones…

“Siempre me ha gustado mucho estudiar y viajo con mi madre solo cuando puedo… Los estudios tienen prioridad”

—Os lleváis muy bien, ¿verdad?

—Nos llevamos muy bien. De carácter somos muy diferentes, pero al final tenemos muchas cosas en común. La parte mexicana, divertida, la tengo como ella. Me encanta México.

—Este año os quedáis solas en casa tu madre y tú

—Diego ya se va este año a la universidad. Me voy a quedar supertriste. Diego es mi mejor amigo, nos llevamos superbien y le voy a echar mucho de menos.

—Eres la que más acompaña a tu madre en sus viajes y sus trabajos. ¿Cómo haces para que no bajen las notas del colegio?

—Nunca paro. Me esfuerzo mucho en el cole, sobre todo en Matemáticas, que es la asignatura que más me gusta. Siempre me ha gustado mucho estudiar y acompaño a mi madre solo cuando puedo… Siempre los estudios tienen prioridad.

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—Desde la separación de tu madre y Emmanuel siempre te vemos a su lado

—Sí. La acompaño mucho. Es una mujer muy fuerte, y muy positiva. Todos estos cambios los ha estado manejando muy bien, aunque sea difícil. Nos ha educado muy bien, aunque ha sido dura. Cuando nos comparamos con otros chicos de nuestra edad, mis hermanos y yo nos sentimos muy afortunados.

—Emmanuel ha sido una persona muy importante para ti. Cuando se casaron tú solo tenías seis años

—Emmanuel siempre ha estado ahí para nosotros y es un hombre muy generoso que siempre se ha ocupado de nosotros. Las cosas siguen así, con los cambios obvios.

—¿Tienes algún hobbie en particular?

—Me gusta mucho la fotografía y me encanta montar vídeos, como de quince segundos, los reels. En redes sociales, tengo TikTok, aunque no subo mucho, también Instagram…

“Soy muy romántica. Tengo un crush, pero no se interesa por mí. Es mayor que yo...”

—¿Eres romántica?

—Soy muy romántica. Tengo un crush, pero no se interesa por mí. Es mayor que yo…

—¿Cómo celebrarás tu cumpleaños?

—Estaré en un campamento, Sherwood, al lado de Boston. Es de deporte. Este es el cuarto año que voy, estoy supercontenta de volver a ver a mis amigas de España y de Estados Unidos.

—Eres muy cosmopolita y muy viajera

—Soy muy afortunada. Me gusta viajar, aprender, conocer gente, de todas partes del mundo. Pero mi país preferido es España, obviamente, porque me encanta la gente española.