Rocío Carrasco se ha convertido en la gran protagonista de la primavera. Después de más de dos décadas optando por el silencio, la única hija de Rocío Jurado y Pedro Carrasco ha dado un paso al frente para contar su historia en un documental llamado Rocío: contar la verdad para seguir viva en el que se pronuncia acerca de los momentos que más le han marcado tanto a ella como a su familia. Este domingo se emitirá el cuarto capítulo, que comienza en verano de 1999, cuando acabó su matrimonio con Antonio David Flores. Tras recordar con crudeza los inicios de su relación con el ex Guardia Civil así como los momentos más complicados del embarazo de su niño, en esta ocasión narra su divorcio. "Pasó de infundir miedo a infundir terror", dice del padre de sus dos hijos, Rocío y David, que en aquel momento tenían tan solo tres años y siete meses respectivamente.
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En Muera el amor, como se titula el cuarto de los 12 capítulos del documental (además del piloto), la empresaria indica que a raíz de su separación empezó a "tener llamadas “muy extrañas tanto de gente que conocía como de gente que no conocía, era terrorífico". Recuerda que el padre de sus hijos, cuyo nombre evita pronunciar en todo momento, contrató para el proceso legal de divorcio al abogado José Emilio Rodríguez Menéndez, quien creó posteriormente una revista llamada Dígame en la que trabajó Antonio David según recuerdan en El programa de Ana Rosa. "Lo usa para llevar a cabo lo que él quería. La finalidad de esta persona era dejarme sola y aislarme. Todo el que estaba a mi lado desaparece", indica Rocío acerca de ese momento que supuso tan solo el comienzo de una batalla legal que se alarga hasta la actualidad.
La llegada de Fidel, su gran apoyo
La primera entrega del domingo se extenderá hasta febrero de 2000. Por tanto, al repasar sus vivencias de esos meses, Rocío, que a finales de abril cumpe 44 años, abordará también el robo que hubo en una caja fuerte de la casa familiar de La Moraleja en la que ella y Antonio David habían estado viviendo con Rocío Jurado y Ortega Cano tras dejar Argentona. Además, se espera que se pronuncie por primera vez sobre su supuesto affaire con José Parra, el empresario de Chipiona con el que la relacionaron sentimentalmente en esa época. Por otro lado, se prevé que dé más datos del inicio de su romance con Fidel Albiac, con el que se casó en septiembre de 2016 tal y como mostró la revista ¡HOLA! en un excepcional reportaje exclusivo con las fotos del gran día, los invitados, las anécdotas...
"Fidel ha sido mi apoyo y mi terapia. Ha sido un corazón abierto y sin pedir absolutamente nada", señalaba en la entrevista previa al documental, donde ponía de manifiesto que la imagen que algunos medios han mostrado de su marido no se ajustan a la realidad sino que "es todo lo contrario" y "quien lo conozca sabe que lo que estoy diciendo es verdad". Fue precisamente el empresario, que dirige el espectáculo Qué no daría yo sobre la vida de Rocío Jurado, quien la encontró en la habitación y la acompañó al hospital el día que tocó fondo y quiso quitarse la vida tomándose "varias pastillas diferentes".
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