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Horas después de dejar el apartamento de Barcelona en el que han estado instalados los últimos meses para poder acompañar a su hijo día y noche durante su ingreso hospitalario, Ana Obregón y Alessandro Lequio han regresado a Madrid. La actriz y presentadora ha vuelto a su casa, ubicada en la urbanización La Moraleja, en coche y en compañía del aristócrata italiano. A pesar de que ambos iban protegidos por mascarillas, ella se la ha quitado durante el trayecto y ha sacado fuerzas para esbozar una sonrisa. Un gesto de agradecimiento a los profesionales de la comunicación que esperaban en la puerta y que tanto cariño le han enviado desde que el pasado miércoles 13 de mayo se conociera el fallecimiento de Álex Lequio tras dos años de valiente lucha contra el cáncer. Y es que, todos aquellos que la conocen y que la han acompañado en su trayectoria personal y profesional, se han volcado en mostrarle todo su afecto en estos difíciles momentos.
Esta misma mañana, Ana y Alessandro ponían rumbo a la capital, donde ambos tienen fijada su residencia. Ella, vestida con jersey negro, chaqueta blanca y grandes gafas de sol salía del portal rota de dolor y cogida del brazo del colaborador de El programa de Ana Rosa, quien lucía camiseta, americana y gorra hacia atrás, un look muy similar al que solía llevar su hijo. Muy unidos y agradeciendo las condolencias los veíamos también la tarde del jueves, cuando se fundían en un cariñoso y reconfortante abrazo al regresar del velatorio Sancho de Ávila de Barcelona, donde descansaba su hijo. La actriz y el aristócrata italiano han contado también con la compañía de Amalia y Celia García Obregón, las hermanas de Ana, quienes tuvieron la oportunidad de desplazarse a la ciudad Condal hace unos días.
Las hermanas de Ana Obregón se trasladaron a Barcelona para acompañarla en los últimos días de Álex
Ya en Madrid, los padres de Álex Lequio podrán recibir personalmente el abrazo de todos esos allegados a los que les ha resultado imposible desplazarse a Barcelona a causa de las restricciones enmarcadas en el estado de alarma. Entre ellos, los familiares de Ana, quienes se han mostrado devastados. "Estamos desolados y tristes, es una pérdida irreparable para nosotros", decía Juan Antonio García Obregón, hermano de la actriz hace solo unas horas para las cámaras de Espejo público. "Nunca había sentido tanto dolor. Nunca jamás habrá nadie como tú. Nunca he visto a alguien luchar tanto por vivir. Mi hermanito pequeño, mi alma gemela, mi cómplice y mi socio. Es raro, te acabas de ir pero siento tu energía como si estuvieras sentado a mi lado como todos esos viernes en tu casa. Te has ido demasiado pronto, teníamos muchos sueños y planes por hacer", escribía Celia Vega-Penichet, sobrina de Obregón. "Se nos ha ido alguien tan grande que no cabía en el mundo", reconocía Celia, otra de las sobrinas de Ana.
Sus primeras palabras
Horas después de conocerse el fallecimiento de Álex Lequio, su madre rompía su silencio para expresar sus sentimientos. "Se apagó mi vida", decía junto a una foto de los dos juntos. También Alessandro Lequio sacaba fuerzas para dedicar unas palabras a su hijo mediano, quien consideraba al aristócrata su mejor amigo. "Ok Àlex got this... i’ll take you out of the woods, but meanwhile remember that you are and will always be my light and my center. Untill the last bullit. It’s the biggest honor to be your father.God bless you Alex", escribía. Unas palabras que en español significan: "Te sacaré del peligro, pero mientras tanto recuerda que eres y siempre serás mi luz y mi centro. Es el mayor honor ser tu padre. Dios te bendiga Álex"
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