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Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition vivió anoche su velada más surrealista, donde el 'El Dioni' fue el anfitrión. Durante la esperada cena, Víctor Sandoval consiguió ser el auténtico protagonista gracias a sus divertidas ocurrencias. El colaborador de televisión hizo gala de su forma de ser desde la llegada al domicilio del anfitrión de esta nueva edición del programa. Sandoval lo tenía claro y suobjetivo no era otro que averiguar dónde están los 140 millones de las antiguas pesetas del robo que llevó a cabo el exguardia de seguridad a finales de los 80. "Le gusta mucho el espectáculo", comentaba Carmen Borrego sobre su compañero.
Minutos después de estar en casa de El Dioni y mientras preparaba la cena como buen anfitrión, Víctor, como un auténtico sabueso, recorrió el comedor buscando el botín. Y las sospechas comenzaron a llegar cuando se percató que en una de las paredes faltaba un cuadro y, encima había marca en la pared. Sandoval comenzo a golpear la pared y llegó a la conclusión de que ahí estaba guardado el dinero. Carmen Borrego y Bibiana Fernández, las otras comensales de la noche, asistían a la divertida puesta en escena sin poder disimular su sonrisa ante las ocurrencias de su compañero de velada.
Víctor aún no había terminado con su cometido. Y, entre plato y plato, visitó al anfritrión en la cocina para supervisar cómo estaba elaborando sus creaciones culinarias el chef de la noche. Además, aprovechó para comparar la cena de ese momento con la que él mismo organizó en los primeros programas: "Ha traído la carne envasada, no como yo que fui a la carnicería", comentaba. Su visita a la cocina de su compañero acabó con el momento de la noche: la 'intoxicación' de Sandoval debido al humo de los fuegos. Tosiendo y con falta de aire, el colaborador volvió al salón, donde Bibiana y Carmen vivieron tal escena con incredulidad.
Pero el colofón llegó con el postre. 'A la saca', como 'El Dioni' le puso al sorbete de limón, cava y vodka que sirvió a sus invitados, provocó el caos final. Una mosca flotando en la bebida de Victor, terminó por arruinarle la cena en la que todo fueron críticas, y no solo a la vivienda, sino también al original menú que se sirvió el improvisado chef de la noche. De ahí que el presentador no tuviera miramientos a la hora de puntuar dándole un 3 al anfritión, asegurando que solo había disfrutado del fin de fiesta con el tablao flamenco con el que terminó la noche.
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