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Dos horas ha durado la intervención para arreglar la fractura de clavícula que sufrió Colate durante una de las pruebas semanales de Supervivientes. "Estaba bastante peor de lo previsto todo. Pero bueno, espero estar ahí esta noche otra vez dando guerra", ha asegurado Nicolás Vallejo-Nájera a su salida de la clínica madrileña Ruber Internacional. Colate ingresaba este lunes en torno a la 13.30 de la tarde en el centro, a donde llegó él solo en un cabify, con el brazo en cabestrillo y una maleta con sus enseres personales. Con algún tornillo más en el hombro -según el parte médico, ocho de ellos más una placa-, el exconcursante no pierde el humor asegurando que tiene "alguno menos en la cabeza". ¿Recibirá a Isabel Pantoja con los brazos abiertos? Dale al play y no te lo pierdas.
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