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Cuando todavía faltan casi dos meses para el esperado estreno de la octava y última temporada de Juego de Tronos, cada vez se van conociendo más detalles de lo que los millones de seguidores de la saga podrán ver en sus nuevos episodios. Los 'trailers' e imágenes y oficiales publicados hace pocas semanas por HBO adelantaban algunas escenas y hacían intuir el posible devenir de los acontecimientos en la gran batalla final por conseguir el Trono de Hierro. Sin embargo, hay algo que no muestra y que una de sus protagonistas se ha encargado de desvelar despertando una gran expectación. Por primera vez después de 8 años, los espectadores podrán ver a Sansa Stark vestida con armadura.
Era la propia Sophie Turner –actriz que encarna al personaje- quien revelaba el dato durante una entrevista concedida al portal estadounidense Entertainment Weekly. "Quería que llevara armadura para que fuera un poco más guerrera, que se alejara de la imagen de la niña inocente que tenía antes. Ella es la guerrera de Invernalia", apuntó la intérprete británica. Sin embargo, no será una pieza tradicional de metal como la de Jaime Lannister o Brienne de Tarth. "Tenemos la idea de que sea muy protectora y cerrada", añadió explicando que la suya será una muy particular confeccionada en un material negro, similar al cuero, que la cubrirá de pies a cuello.
Un detalle que incita a pensar que la primogénita de la familia Stark podría tener un importante papel en el épico enfrentamiento que pondrá fin a la saga. A pesar de ello, todavía no existe ninguna imagen de la intérprete ataviada con esta singular vestidura de guerra. Las imágenes promocionales proporcionadas por la productora de la serie solo mostraron a Sansa Stark en el primer episodio de la temporada saludando a Jon Snow (Kit Harington) y Daenerys Targaryen (Emilia Clarke). De modo que los fans todavía tendrán que esperar algo más para contemplar esta escena desde sus pantallas.
Este cambio de vestuario no hace otra cosa que confirmar la evolución del personaje de Sansa a lo largo de toda la saga. Si bien durante las primeras temporadas lucía una imagen un tanto infantil con prendas coloridas, con el paso de los años su imagen ha ido madurando a través unas ropas más oscuras y adultas.
No se trata de la primera vez que Sophie Turner se aventura a desvelar algún dato acerca del posible desarrollo de la ficción. Hace unos meses provocó un gran revuelo entre los seguidores de Juego de Tronos al hacerse un polémico tatuaje que muchos de ellos interpretaron como un 'spoiler' del final de la serie. Una decisión que ella misma terminaría calificando como desafortunada según unas declaraciones recogidas por el medio Digital Spy. "Sí, seguramente ese tatuaje no fue una buena idea. Todo el mundo pensaba que había revelado el final, cuando para nada era el caso", admitió.
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