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Richard Gere se encuentra en pleno estreno de su última película, Norman. El hombre que lo conseguía todo. La promoción del largometraje le mantendrá ocupado y probablemente moviéndose de un lado a otro, pero la premiere que tuvo lugar en Madrid este miércoles por la noche fue sin duda especial. Primero, porque se encontraba en España, tierra de su novia, la coruñesa Alejandra Silva. Y segundo, porque se trataba de un evento benéfico que destinaba los fondos recaudados con la venta de entradas a una buena causa: la Fundación Juegaterapia, de la que es embajadora Alejandra Silva, que ayuda a niños enfermos de cáncer a través del juego y cuyo lema es “la quimio jugando se pasa volando”, y a la Fundación ICT, que trabaja para promover los derechos humanos y la democracia en el Tibet.
Acompañado por Alejandra, Richard presentó su última película en los céntricos Cines Callao de la capital, en la plaza del mismo nombre, abarrotada con motivo de la presencia de una gran estrella de Hollywood. El veterano actor posó sobre la alfombra roja muy cariñoso con su novia, y también con los pequeños Mateo y Carmen, dos niños con los que trata Juegaterapia, mostrándose muy cercano con ellos.
-Richard Gere y Alejandra Silva sorprenden y emocionan a los niños enfermos del hospital Niño Jesús
Divertido y simpático, el actor estadounidense no dudó en fotografiarse con sus fans (que también le pedían selfies a su novia, Alejandra) y contestar amablemente las preguntas de la prensa, entre otras, si tiene planes de boda con su pareja. "No soy lo suficientemente bueno para ella", bromeó el intérprete. Comentó, además, que le encanta visitar España pero que de momento no entra en sus planes quedarse a vivir allí.
Numerosos rostros conocidos quisieron disfrutar del acontecimiento al tiempo que aportaban su granito de arena acudiendo a este evento benéfico. Cari Lapique, Carla Goyanes, las actrices Elena Ballesteros, Mónica Pont, Mariona Ribas o Yaima Ramos, el actor Daniel Muriel, la periodista Lucía Villalón... son algunos de los que no se lo perdieron.
En Norman. El hombre que lo conseguía todo, del israelí Joseph Cedar, Richard Gere cambia radicalmente de imagen para dar vida a un embaucador sin ego ni fortuna que trata de abrirse camino en los laberintos del poder, un personaje "completamente único" para el actor. La película se centra en las andanzas del empresario Norman Oppenheimer. Años después de comprarle unos zapatos a un político israelí, este se convierte en primer ministro de su país, y Norman intentará aprovechar su momento en las esferas más privilegiadas de la sociedad.
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