Dicen a veces que las segundas partes no son buenas, pero a veces los dichos se equivocan. En cuestiones de amor nunca se sabe y en esta ocasión Eva González y Cayetano Rivera han demostrado que el tiempo que estuvieron separados sólo sirvió para unirles aún más. No sólo la pareja retomó su noviazgo hace unos meses con ilusión sino que además decidieron dar un paso más encontrando un nuevo “nido” para su historia de amor.
Se han mudado a una casa en el centro de Madrid que comparten y en la que han comenzado una nueva etapa de su relación que es más sólida que nunca. A la vista está fijándonos en las imágenes que hay de ellos, en las que, ajenos a las miradas indiscretas, se besan antes de despedirse. Cayetano al volante de su coche, a pesar de que lleva un brazo vendado, le da un largo beso a Eva, parece que no quieren separarse, que se marcha con una sonrisa.
“La decisión de darnos una oportunidad más es con toda la ilusión del mundo y alegría” señaló Cayetano, tras su reconciliación. Sin duda están en el mejor momento de su relación. Sin embargo y como han dicho en varias ocasiones por ahora el tema de la boda no entra en sus planes. Tal vez, como dejó caer Eva, se decidan a ser padres antes… el tiempo dirá.
Aunque desde que se reconciliaron no han acudido juntos a ninguna cita pública, sí que se les ha visto haciendo la mudanza o compartiendo una velada en el restaurante del exdiestro. Compaginan sus respectivos compromisos profesionales, él sus negocios y ella la grabación del programa MasterChef Junior, con su vida personal a la perfección y siempre que tienen un rato lo aprovechan para estar juntos. Es lo que tiene estar enamorado.
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