ALDEAS HISTÓRICAS
Al otro lado de la raya, una docena de pequeños pueblos de la región Centro trazan una ruta sorprendente donde revivir la historia de Portugal sin apenas cruzarte con gente. Son pequeños y, sin embargo, cargados de arte e historia, con castillos, murallas, capillas, pelourinhos y una austera arquitectura de granito. Si Almeida puede ser un buen punto de partida, el recorrido continúa por Castelo Mendo, Marialva, Idaha-a-Velha, Monsanto (el que dicen es el pueblo más portugués de Portugal), curioso por los enormes bolos de granito que, en ocasiones, sirven de techo a sus casas y delimitan sus calles, o Castelo Rodrigo (en la imagen), rodeado de imponentes murallas.