Este es el pueblo más bonito de Castilla-La Mancha: 70 habitantes y escenario de las campanadas de Fin de Año


Un pequeño municipio de la Serranía de Cuenca ha sido proclamado ganador y será el gran protagonista de esta comunidad para dar la bienvenida a 2026


Huélamo, elegido el Pueblo Más Bonito de Castilla-La Mancha 2025
11 de diciembre de 2025 - 19:30 CET

Tras imponerse en una final muy reñida, anoche se daba a conocer El pueblo más Bonito de Castilla-La Mancha 2025, en un concurso realizado por la televisión autonómica en el que han participado 15 localidades manchegas, de las que solo 5 llegaron a la final: Casas de Ves, en Albacete; Membrilla, en Ciudad Real; Huélamo, en Cuenca; Berninches, en Guadalajara; y Pelahustán, en Toledo.

Una participación masiva, con más de 8.500 votos que han convertido a Huélamo el vencedor de esta edición, y haciendo de esta pequeña y despoblada localidad –apenas cuenta con 70 habitantes– el epicentro de la celebración navideña en la región. Porque, y como reconocimiento, su plaza Mayor será el lugar elegido para retransmitir las campanadas de Fin de Año de Castilla-La Mancha Media, un acontecimiento que pondrá en valor la belleza y autenticidad de los pueblos más pequeños de esta comunidad.

Como no podía ser de otra forma, la final ha estado marcada por la emoción y el reparto de las votaciones quedó así: Huélamo obtuvo 8.509 votos, seguido muy de cerca por Pelahustán, con 7.500; Membrilla alcanzó los 5.107 votos; Berninches, 4.849 y, finalmente, Casas de Ves obtuvo 2.996 votaciones.

Tras conocer el resultado, Leopoldo Martínez, Alcalde de esta localidad, expresó: “Es un orgullo y honor para Huélamo, toda una satisfacción. Ha habido tanta gente trabajando para llegar aquí. Hay que agradecerles a todas las personas que han hecho muchísimo”. Queriendo reconocer el trabajo y tesón de los ciudadanos de este pequeño pueblo conquense.

Huélamo, elegido el Pueblo Más Bonito de Castilla-La Mancha 2025

Huélamo, una joya en el Parque Natural de la Serranía de Cuenca

Para los que buscan una escapada a uno de esos destinos poco transitados, localidades que mezclan autenticidad y belleza, Huélamo se encuentra en las faldas de un cerro, a unos 1300 metros de altitud, con vistas al valle del Júcar y a una hora de Cuenca capital (unos 60 kilómetros).

En un entorno natural privilegiado, rodeada de pinares y montañas, transmite la esencia de los pueblos serranos, con paseos por calles empedradas, pequeñas y encantadoras plazuelas, una arquitectura tradicional de casas blancas y tejados rojizos y unas vistas espectaculares del valle.

En su entorno es posible practicar senderismo, cuenta con varios senderos bien señalizados e, incluso, una Asociación de Senderismo que realiza actividades a lo largo del año.

A la hora de comer, desde el propio pueblo recomiendan acercarse al restaurante Casas Colgadas (restaurantecasascolgadas.com), situado en Cuenca (C. canónigos), para disfrutar de la deliciosa gastronomía del chef Jesús Segura, vecino de esta pequeña localidad, que mantiene su estrella Michelin tras la gala celebrada el pasado mes de noviembre en la ciudad de Málaga. Una recomendación que llevan con doble orgullo, por su vecino y por ser el único restaurante de toda la provincia con esa distinción.

Otros rincones para descubrir la Serranía de Cuenca

Más allá de Huélamo, el Parque Natural de la Serranía de Cuenca ofrece una increíble belleza de la que merece la pena empaparse en una escapada. Entre las rutas que no hay que perderse están:

Nacimiento del Río Cuervo Cuenca© Shutterstock

Monumento Natural del Río Cuervo

A 20 minutos en coche de Huélamo, y a una hora de Cuenca, nace el río Cuervo, cuyas aguas construyen un espectacular escenario de cascadas por bosques de musgo de gran belleza. Para acceder desde Tragacete hay varios senderos, pero el más habitual es el sendero del nacimiento, de 1.5 kilómetros y baja dificultad, que va pasando por pozas cristalinas y caídas de agua.

El Hosquillo

Una hora separan Huélamo de El Hosquillo (parqueelhosquillo.com), un emblemático parque, perfecto para visitar en familia, donde se conocen muflones, ciervos, osos… y desde 2025 el lobo ibérico. Se visita los fines de semana (de marzo a diciembre), así como festivos y puentes. Se accede en vehículo propio, siempre por pistas asfaltadas, y previa reserva. Las visitas son siempre guiadas, se realizan en grupo y se visita también el Centro de Interpretación y el museo. Una vez en el exterior, hay que admirar el paisaje, que es tan especial como la fauna que en él habita.

Ciudad Encantada de Cuenca© Shutterstock

La Ciudad Encantada

Esta excursión nos lleva, a 35 minutos desde Huélamo, a uno de los espacios naturales más conocidos de la provincia (ciudadencantada.es), en la localidad de Valdecabras. Esculturas imposibles formadas a golpe de agua sobre la roca caliza que se han bautizado con curiosos nombres como Los Barcos, El Perro, El Elefante, El Tormo Alto, La Foca… Abren todos los días del año, aunque en esta época hay que visitar su web y estar atentos al horario de cierre, que por la luz se adelanta.

La Laguna de Uña

A más de mil metros de altitud, esta laguna, junto al pequeño pueblo del mismo nombre, recibe las aguas del arroyo Rincón, afluente del Júcar, con la vegetación típica de los humedales. Allí podréis contemplar fauna acuática, pero también aves rapaces, incluso es posible encontrarse en las inmediaciones algún ciervo o gamos. Se recorre por dos senderos, de 3,5 kilómetros y 9 kilómetros respectivamente, con varias pasarelas de madera junto al agua y miradores.

La ventana del Diablo, Cuenca© Shutterstock
Paisaje visto desde La ventana del Diablo, Cuenca© Shutterstock

La Ventana del Diablo

No dejes de asomarte en este mirador natural sobre el río Júcar, situado a poco más de media hora de Huélamo, con fácil acceso en coche e impactantes vistas.

Media Image© Shutterstock

Los Callejones de las Majadas

Un último espacio natural en la zona que merece la pena visitar: Las Majadas, un paisaje geológico de rocas gigantes que es algo mágico. Se visita a través de senderos y sin guía paseando entre las formaciones que han creado pasadizos, laberintos, arcos, puentes y monolitos. Hay un recorrido circular, de algo menos de 4 kilómetros y dificultad baja, perfecto para una excursión en la zona.

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