Las fachadas de las casas reflejadas en el río Onyar, la catedral y su escalinata, la judería… todo es más bonito en Girona en el mes de mayo y huele mejor, porque ha llegado la primavera y con ella, el festival más esperado: Temps de Flors, cuando toda la ciudad se convierte durante 9 días en un auténtico vergel, lleno de color, aroma y belleza. Una celebración que se sucede año tras año y que en 2025 celebra su 70ª edición.
Entre el 10 y el 18 de mayo, miles de flores embellecen los edificios más emblemáticos del centro histórico, así como calles, plazas, patios y jardines. Más de 100 instalaciones y arreglos florales estarán repartidos por los diferentes barrios ofreciendo una postal efímera de la ciudad que no se podrá ver en ningún otro momento del año. Motivo más justificado para hacer una escapada de unos días a esta ciudad llena de encanto e historia.
LA 70ª EDICIÓN DE 'TEMPS DE FLORS'
Nuevas rutas y espacios florales para celebrar la 70ª edición del festival, además de la apertura de patios privados que habitualmente están cerrados al público. Hasta 114 espacios diferentes –y 146 proyectos florales– que se podrán visitar estos días, en dos horarios: de 9:30 a 21 (flores de día) y hasta las 23 h, 24 h los sábados, para las flores de noche, en espacios interiores. Tanto unos como otros han sido decorados por jardineros, en unos casos, y por los propios vecinos, en otros, que contribuyen a embellecer la ciudad.
Repartidas por todos los barrios, el Ayuntamiento ha facilitado planos de varias rutas a través de la web del festival (tempsdeflors-girona-cat) para facilitar los recorridos y descubrir todas las instalaciones. La Ruta 1 recorre el Barrio Viejo, Mercadal y Sant Daniel; la Ruta 2, San Narciso, Santa Eugenia y Can Gibert del Pla; y la Ruta 3, lo hace por el Eixample, Pla de Palau y Vista Alegre.
LAS NOVEDADES DE 2025
La zona de la plaza del Vino y la calle de la Alameda acogerán 3 nuevos espacios de exposición: el Patio de Casa Carles, el edificio emblemático que albergaba una cestería y una floristería, y bajo el arco de la calle del Auriga. Las escaleras del Teatro Municipal y el refugio antiaéreo se recuperan, después de unos años sin flores, y el patio del Ayuntamiento tendrá un proyecto floral conmemorativo de los 40 años de hermanamiento con la ciudad de Albí. La rambla de la Llibertat tendrá más flores que nunca, con proyectos en la fachada de la Casa Norat y debajo de las Voltes, hasta la calle de la Argenteria conectando con los puentes y la plaza de la Independencia. También se abrirá por primera vez la Casa Sabater, la Casa Carles y la Farinera Teixidor.
Temps de Flors no solo son espacios florales, también hay música, exposiciones o visitas guiadas que no nos podemos perder. Bajo el título de Nits de Flors i Música, se han programado conciertos de jazz y blues en espacios emblemáticos, como los jardines de Josep Tarrés y Fontan, en la romana torre Gironella; en la plaza de los Jurados o la plaza de Sant Domènec. También se podrá asistir al Festival Girona A Capella, con distintas actuaciones corales entre el 10 y el 18 de mayo.
Este año hay que tener en cuenta que la celebración de Temps de Flors coincide con la Noche de los Museos, el día 17 de mayo, y el Día Internacional de los Museos, el 18 de mayo, con visitas guiadas y actividades de puertas abiertas en los museos de la ciudad. Habrá también exposiciones en el Museo de Historia de Girona o en el Centro Cultural La Mercé, entre otros espacios.
LOS ESPACIOS MÁS DESTACADOS
Son muchos los rincones que no hay que perderse en la ciudad, pero uno de los proyectos más importantes lo encontramos en las escaleras de la Catedral, como homenaje a los 70 años de Temps de Flors, decoradas con una inmensa alfombra floral.
También emblemáticas las decoraciones de los Baños Árabes; los distintos rincones, calles y edificios de la judería, con sus estrechas callejuelas que crean un ambiente único; o los patios medievales del Barri Vell. A tener en cuenta, la rambla de la Llibertat, que este año tendrá más flores que nunca y más allá del centro, los puentes sobre el río Onyar, desde donde se obtiene una preciosa vista de las fachadas de colores reflejadas sobre el río.
GASTROFLORS, FLORES Y GASTRONOMÍA
¿Alguna vez has comido flores? Esto es lo que propone Gastroflors, una oferta gastronómica única que hace que durante los días que dura el festival distintos establecimientos se atrevan con una iniciativa culinaria donde se han elaborado menús inspirados en las flores. Podrás probarlos en restaurantes como Mimolet (mimolet.cat), un espacio sofisticado donde degustar excelentes productos naturales y de proximidad con su menú degustación, o en La Tabarra (latabarragirona.cat), del mismo grupo. También en Graner by Roent o en Girum (girumrestaurant.com), entre otros.
PARA ALOJARTE EN GIRONA
Calma, serenidad, desconexión, el suave trino de los pájaros a modo de ‘banda sonora’… Seguramente, no es lo primero que a uno le viene a la cabeza si piensa en un hotel ubicado en plena urbe. Y, sin embargo, es exactamente lo que encontramos al cruzar el formidable portón del Hotel Palau Fugit (palaufugit.com). Ubicado en el corazón del animado Barri Vell, este antiguo palacio del siglo XVIII se convertía en 2022, tras una gran reforma, en un sofisticado y moderno hotel que, no obstante, no ha perdido la esencia del antiguo edificio donde se aloja.
Su interiorismo, en el que dialogan historia, naturaleza y arte, hace que la sensación de paz y calidez no tarde en aparecer. Un lujo tranquilo, sin estridencias, donde todo está cuidado hasta el mínimo detalle. Lo apreciamos no solo en las habitaciones (25 en total, entre las que figuran hasta 9 categorías, pensadas para todo tipo de preferencias), sino en todos y cada uno de sus espacios: desde ‘La Placeta’, justo en la entrada, perfecta para tomar un café o un vermut con unas tapas; a ‘Casa Heras’, el restaurante del hotel (mucha atención a su desayuno); la coctelería ‘El Gipsy’, abierta también a los no alojados; o la terraza ‘El Terrat’, un rooftop con vistas a la primera muralla de Girona donde disfrutar de bonitos atardeceres.
No nos olvidamos de 'La Cova d’Aigua', con una pequeña piscina de agua caliente y una zona de masajes y tratamientos en la que la tranquilidad y el sosiego suben, incluso, un peldaño más. En definitiva, una dirección de verdadero capricho para alojarse en Girona, sea durante Temps de Flors o en cualquier otra época del año.