En 2010, cuando la FIFA eligió a Qatar como sede del Mundial, tan solo los entusiastas de las carreras habían oído hablar de Lusail, pues esta no era más que un desierto y un circuito internacional de moto GP cuyo atractivo residía, precisamente, en estar rodeado de arena. Solo 12 años después, esta ciudad creada de la nada es ya una realidad y una prueba de que en este país de lujos y excentricidades todo es posible.

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La ciudad inteligente que el país árabe ha construido desde cero para el Mundial de fútbol está a solo 15 kilómetros de Doha. Una gran urbe de 200.000 habitantes que, además de la joya de la corona, el estadio en el que se jugará la final, ya cuenta con todas las infraestructuras necesarias para vivir: zonas residenciales, hoteles de lujo, centros comerciales, hospitales, centros de negocios, deportivos, colegios, mezquitas, puerto marítimo y hasta campos de golf.

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Otro hito arquitectónico de Lusail es Marina Twin Towers, dos edificios gemelos de oficinas ubicados en el distrito Marina levantados para impresionar. Primero, porque recuerdan a los coloridos bloques de Lego, pero también porque algunos de estos están desplazados y parecen salirse del edificio. Y asombran, además, por sus asombrosas vistas sobre The Pearl, el archipiélago artificial convertido en un lugar residencial y comercial de lujo donde en otro tiempo se realizaban las recolecciones de perlas antes de que la industria petrolera se convirtiera en el principal motor de la economía qatarí.

Pero en esta ciudad inteligente y tecnológica, que también apuesta por la calidad de vida en un entorno sostenible, lo que llama la atención como en otras del Golfo Pérsico es su impresionante arquitectura futurista. Prueba de ello son las Katara Towers, una estructura inspirada en las tradicionales espadas de cimitarra del sello nacional y formada por dos torres arqueadas de 36 pisos que en sus 211 metros de altura acoge hoteles de lujo –entre ellos, el primer 6 estrellas del país–, apartamentos exclusivos, además de una isla artificial con tiendas, restaurantes, oficinas, instalaciones de ocio y deportes náuticos… Sin olvidar las Torres Zig Zag, cuyo nombre hace referencia al diseño angular de estos rascacielos que completan el increíble skyline de la ciudad.

Entre la arquitectura futurista de esta ciudad de Qatar se encuentra la del Lusail Sports Arena, un estadio para albergar eventos deportivos y grandes conciertos y, sobre todo, el Estadio Icónico de Lusail, el más grande del Mundial y en el que se disputará, el próximo domingo 18 de diciembre, la final. Con capacidad para acoger a 86.000 aficionados, se trata de un diseño creado por el despacho del prestigioso arquitecto Norman Foster que está inspirado en la lámpara árabe tradicional y ha sido adornado con cuencos y artesanía árabe para reflejar el patrimonio y la cultura de Qatar.

En los 35 kilómetros cuadrados por los que se extiende Lusail también sobresale su paseo marítimo, por el que caminar entre palmeras, fuentes interactivas y puestos de comida contemplando los yates; y un puente colgante circular que resulta aún más espectacular cuando se ilumina de noche...

Otro de los puntos clave es, sin duda, Lusail Boulevard. Inaugurado a principios de noviembre, está inspirado en los icónicos Campos Elíseos y a lo largo de sus 1,3 kilómetros se puede encontrar una increíble selección de restaurantes y tiendas. Al final del boulevar se encuentra la plaza Al Sa’ad, uno de los centros vitales de Lusail con sus cuatro torres y espectaculares vistas al mar.

Crescent Park es el lugar en el que tomarse un respiro en medio de esta jungla de cemento. Un parque inspirado en el desierto y sus dunas de arena construido sobre el concepto de sostenibilidad. En este verdadero oasis hay un laberinto vegetal, senderos para montar en bicicleta, zonas deportivas, infantiles y una enorme estructura de acero llamada El Arco, a la que se puede subir para contemplar las vistas del entorno. 

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Y tiempo llevará entregarse al placer de las compras en el exclusivo centro comercial Plaza Vendôme, inspirado en París y con un canal que lo atraviesa y llega hasta el mar. De las compras y de la alta gastronomía, porque aquí se pueden encontrar desde restaurantes de cocina italiana a las del lejano oriente.

Como Lusail no deja de crecer, en los últimos meses ha acogido alguna de las atracciones más originales de Qatar. Entre ellas, Lusail Winter Wonderland, que ha conseguido llevar el invierno y toda su magia al país del golfo con sus más de 50 atracciones, juegos y entretenimiento. El parque se encuentra en la isla Al Maha, situada en el paseo marítimo de Lusail y hogar también de todo un distrito gastronómico y beach clubs donde aprovechar el suave clima qatarí en invierno.

Otra isla ideal para visitar es Qetaifan Island North, que acoge estas semanas durante el campeonato alojamientos para fans junto a un beach club donde disfrutar del mejor ambiente deportivo. Una zona, además, que no deja de crecer y en 2023 dará al bienvenida a un impresionante parque acuático y hoteles de primer nivel.