EL BOYEO
Los ticos, como también son conocidos los costarricenses, son gente hospitalaria y trabajadora. Los campesinos, al mando de su carreta tirada por bueyes, han ejercido el oficio del boyeo durante generaciones, aprendiendo desde pequeños, junto a su familia; al igual que los bueyes, enseñados desde jóvenes a la difícil tarea de arar el campo, hacer girar las muelas del trapiche (molino), transportar leña, caña dulce, maíz o café o ir de paseo. Hoy en día, el boyeo forma parte de los principales festivales, fiestas, desfiles y acontecimientos del país y la Unesco lo ha declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
Costa Rica, siempre hay una primera vez