Adiós a la celulitis a partir de los 60: esta es la combinación clave que sí ayuda

Esta crema reafirmante de e'lifexir se ha formulado con retinol vehiculizado, centella asiática y cafeína, tres de los ingredientes más recomendados para tratar la celulitis en pieles maduras. 

El primero de ellos se encarga de favorecer la renovación celular, reduciendo los signos de la edad, suavizando la textura de la piel y mejorando su hidratación y firmeza. La segunda estimula la microcirculación y difumina las estrías y las marcas presentes en la piel. Y la última activa la quema de grasas y la circulación de los líquidos para conseguir ese efecto reductor y alisador de la piel de naranja. 

Pero además, al combo se han añadido phytosonic, niacinamida y palmitol carnitina, que mejoran la producción de colágeno y elastina, estimulan la quema de grasas y reducen la inflamación, lo que se traduce en una piel más tersa y firme.

Aplícala todas las noches masajeando conscientemente las zonas que desees tratar, o acompañando el tratamiento con un masajeador anticelulítico para potenciar sus efectos.

Estoy segura de que conoces el aceite anticelulítico de WELEDA, ya que es uno de esos productos top ventas en su categoría que casi todas las mujeres que han probado, recomiendan. En concreto, su fórmula con extractos de hojas de abedul, romero y rusco se centra en activar la circulación de los líquidos y el metabolismo de la piel, de forma que la celulitis se reduce y los contornos se reducen. 

Pero además, la fórmula se ha completado con germen de trigo, aceite de hueso de albaricoque y aceite de jojoba, que nutren la piel, mejoran su elasticidad y la tonifican, potenciando el efecto anticelulítico del producto.

Todo ello en una fórmula natural que dejará tu piel realmente suave al tacto.  

A la hora de elegir el exfoliante corporal que consigue una piel más suave y bonita, vas a encontrarte con infinidad de opciones. En tu caso, lo ideal es que apuestes por un producto que, además de exfoliar, contenga activos hidratantes que eviten la pérdida de humedad, así como antioxidantes que la protejan de los radicales libres y el envejecimiento. 

Es el caso del exfoliante corporal Velvet Scrub de COCUNAT, un producto creado con sales marinas y sal del Himalaya, que eliminan las células muertas y las impurezas de la superficie de la piel, estimulan su renovación y activan la microcirculación. 

Pero además, se ha enriquecido con aceite de almendras, rico en vitamina E antioxidante, y aceite de albaricoque, que hidratan la piel y mejoran su elasticidad, consiguiendo un efecto tensor. Todo ello rematado con el aroma cítrico del aceite esencial de litsea cubeba, famoso por sus propiedades relajantes. 

Aplícalo una o dos veces a la semana durante la ducha, masajeando suavemente por todo el cuerpo y aclarándolo bien después. 

Hidratar la piel del cuerpo, al igual que hacemos con el rostro, es fundamental para mejorar su elasticidad y mantenerla a salvo de las estrías y otras imperfecciones. Pero además, a partir de los 45 años la dermis tiende a resecarse y perder humedad, por lo que este paso cobra aún más importancia. 

Es por eso que te recomiendo hacerte con el Hydro Boost Gel Crema Corporal de Neutrógena. Un producto enriquecido con ácido hialurónico que no solo mejora la hidratación de la piel, sino que también la ayuda a retener mucho mejor la humedad. Una fórmula testada por dermatólogos que es totalmente apta para pieles sensibles. 

Además, su textura en gel ultraligera se absorbe al instante y no deja tacto graso. 

Utilizar un masajeador anticelulítico es casi obligatorio para reducir eficazmente la celulitis a partir de los 60 años. Y no vale cualquiera. En tu caso, debes buscar un modelo potente que se enfoque en tratar la piel más allá de activar la circulación. 

Por ejemplo, este masajeador anticelulítico 3 en 1 de Depsoul que combina la tecnología eléctrica con las microcorrientes y la terapia de calor para provocar contracciones musculares, estimular la producción de colágeno y elastina, activar la quema de grasa y tonificar. Es muy eficaz, por lo tanto, tanto para alisar la piel de naranja y difuminar estrías e imperfecciones, como para reducir el contorno y reafirmar la piel. 

Para ello, cuenta con 3 modos de funcionamiento y una función de calor que podrás activar o desactivar según lo desees. También puedes ajustar la intensidad en 10 niveles, de forma que se adapta totalmente a tu tipo de piel. Y es realmente cómodo y fácil de usar. 

Por muchos cambios que hagas y lo mucho que te esfuerces, es posible que no consigas aportar a tu cuerpo todos los nutrientes, vitaminas y elementos que necesita. Y aquí es donde entran en juego los suplementos alimenticios. En este caso, he escogido el Omega-3 porque contribuye a mantener los procesos del cuerpo que en esta etapa tienden a ralentizarse y deteriorarse, mejorando la salud.

Concretamente, retrasa el deterioro cognitivo, reduce la inflamación, mejora la presión arterial y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, evita el deterioro visual y mejora la hidratación y elasticidad de la piel. Punto, este último, clave para luchar contra la celulitis y las estrías.  

En este caso, he seleccionado las cápsulas de Longevitas Labs porque cuentan con las certificaciones IFOS y Friends of the Sea, las cuales garantizan que se trata de un suplemento de gran calidad y pureza, obtenido a través de fuentes sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Además, su biodisponibilidad (es decir, la facilidad de nuestro organismo para absorberlo) es mucho mayor que la de otros productos de peor calidad o más asequibles. Su eficacia, por lo tanto, será mayor.

La dosis recomendada es de dos cápsulas diarias.

Aunque lo ideal es que acudas a un gimnasio o un entrenador personal, especialmente si no tienes mucha experiencia practicando ejercicios de fuerza, contar con unas mancuernas ajustables te va a venir muy bien para entrenar en casa y mantener la constancia. 

Y esta pareja me ha encantado porque presenta un diseño compacto que te resultará comodísimo, así como una superficie antideslizante que evitará que se te resbalen incluso con sudor y protegerá el suelo. 

Aunque lo que me ha convencido es la posibilidad de ajustar los pesos de 1 a 5 kilos, en rangos de un kilo. De esta forma, podrás empezar por el más bajo e ir aumentando según la zona que estés trabajando o conforme aumente tu fuerza (y es que, para ganar masa muscular, es fundamental ir aumentando los pesos). 

Es además muy fácil de ajustar, ya que simplemente tendrás que desenroscar los extremos y añadir o quitar las barras de peso de 0,5 kilos cada una.