GUSTAVO V: EL MONARCA QUE SE NEGÓ A SER CORONADO

Por hola.com

Fue el primer rey sueco que ocupó el trono sin pasar antes por la ceremonia de la coronación. Una medida que no debería ser interpretada como indicio de un pensamiento más democrático sino como una reacción contra el gusto de Oscar II por los grandes fastos. Por el poder del Rey, sin embargo, si que estaba dispuesto a luchar Gustavo V.

Aunque, la "guerra" de los diez primeros años de reinado tuvo, en 1914, con el "Discurso del patio del Palacio" un mal final para sus pretensiones. A pesar de su derrota personal, el rey Gustavo V, se ganó el afecto de su pueblo durante su largo reinado (1907-1950) y se convirtió en un símbolo unificador durante la II Guerra Mundial. Los suecos le apreciaban porque era un monarca sencillo, poco amigo de la ostentosidad y, también, por sus logros como arqueólogo. Además, siguió democráticamente las reglas establecidas por la Constitución y contribuyó, enormemente, al desarrollo de la democracia. De hecho, bajo su gobierno se esbozaron los cambios de la Constitución que, en 1975, habría de sustituir a la de 1809 y se sentaron las premisas para que Suecia siguiera siendo una monarquía con la dinastía Bernadotte al frente.