No está siendo una etapa fácil para la Familia Real de Noruega. Siempre han contado con el respaldo del pueblo, pero el caso Marius ha supuesto un auténtico tsunami con devastadoras consecuencias que siguen creciendo. Por si esto fuera poco, en la cuenta atrás para decir adiós al 2025 han recibido la noticia que lo convierte definitivamente en su annus horribilis: la enfermedad de Mette-Marit ha empeorado y se está barajando la posibilidad de someterse a un trasplante de pulmón. Una situación crítica de la que han informado oficialmente mediante un comunicado y de la que se han pronunciado públicamente los reyes Harald y Sonia, las dos primeras personas de la corona nórdica en hablar de este delicado asunto que está lleno de incógnitas.
"Es triste verla enferma, eso está claro. Esta enfermedad tampoco se nota mucho por fuera, así que creo que es muy difícil para ella, porque quiere hacer un buen trabajo, pero no tiene fuerzas. Esto es algo que preocupa a toda la familia", ha comentado Sonia de Noruega durante su intervención en Un año con la Familia Real, espacio de NRK que se emite cada diciembre como resumen del año de la Corona, incluyendo imágenes de eventos oficiales a los que han asistido y también entrevistas de los propios miembros de la realeza.
Sobre la agenda que sigue manteniendo a pesar de las circunstancias se ha pronunciado Harald V, quien ha dicho: "Ella hace lo que puede y, desgraciadamente, cada vez es menos. La enfermedad está en constante evolución. Es difícil, pero tenemos que vivir con esto". Desde que en 2018 fue diagnosticada de fibrosis pulmonar, Mette-Marit ha reducido sus apariciones públicas y ha habido periodos en los que ha estado de baja porque no se encontraba bien o por los efectos secundarios derivados de su medicación. Sin embargo, no se conocía el importante alcance de su dolencia.
Las palabras de la propia Princesa y de su hija
La propia Mette-Marit ha confesado ante las cámaras que la evolución ha sido difícil para ella y también para los que la rodean. "En las familias en las que alguien está enfermo, es evidente que eso afecta a todos. Para mí es muy importante que los niños puedan vivir sus vidas y comprendan lo mucho que eso me alegra. Como ahora con Ingrid, que está estudiando en Australia. Eso significa muchísimo para mí. Es importante que no tengan que hacer nada diferente por mi situación. Pero está claro que para ellos también es un proceso. Sin duda, también ha sido difícil para ellos", ha confesado.
En el mismo espacio, también Ingrid de Noruega ha hablado de la situación: "Es difícil. Mi madre padece una enfermedad crónica desde hace mucho tiempo. Pero intento mantener el contacto con ella, hablamos a menudo por teléfono. Y creo que ella quiere que disfrute de mi vida como estudiante y que esté aquí estudiando. Lo sé. Pero, por supuesto, es difícil estar lejos. Y me siento orgullosa de mi madre, que ahora tiene una fuerza increíble". La segunda en la línea sucesoria al trono estudia Ciencias Sociales en la Universidad de Sidney y vive en la residencia del St Andrew’s College, en Newton (Nueva Gales del Sur).
Los últimos detalles de la salud de Mette-Marit
Las últimas pruebas que le han realizado a Mette-Marit de Noruega muestran una evolución en su enfermedad, lo que ha llevado a los médicos del Rikshospitalet a iniciar los preparativos para evaluar su posibilidad de un trasplante de pulmón. "Nos acercamos al momento de realizar un trasplante de pulmón y estamos realizando los preparativos necesarios para que sea posible cuando llegue ese momento. Aún no se ha decidido cuándo la princesa heredera entrará en lista de espera para un trasplante de pulmón", ha afirmado Are Martin Holm, jefe de departamento y profesor de Neumología del Rikshospitalet. El propio doctor ha dicho que normalmente suele haber entre 20 y 40 pacientes en lista de espera y que no tiene prioridad sobre ellos, Ha destacado además que "aún es pronto para incluirla en la lista de donantes, pero se está monitoreando de cerca su caso" y ha dicho que "es una operación importante y da miedo", pero que hay esperanza en ello. Los trasplantes de pulmón no se realizan a menos que sea absolutamente necesarios y la enfermedad de la princesa "es grave".






