Tras la ceremonia oficial de bienvenida y el posterior almuerzo en Windsor, Donald y Melania Trump han sido conducidos por Carlos y Camilla de Inglaterra hasta la Royal Collection que se encuentra en el interior del emblemático castillo. Se han unido por sorpresa el príncipe Guillermo y Kate Middleton, quienes a primera hora de la mañana fueron los encargados de recibir al presidente y la primera dama en su primera toma de contacto. Esta vez, durante su paseo por la Colección Real, estaba también con ellos el secretado de Estado norteamericano, Marcos Rubio.
Con unos guías de excepción como estos, el mandatario y su mujer han podido conocer las obras de arte y los objetos de incalculable valor que se muestran en este lugar único, algunos precisamente relacionados con la historia de EE.UU. De hecho, en su paso por el denominado Salón Verde, el objetivo de los Reyes y de los Príncipes de Gales era enseñar a sus invitados todos esos enseres que unen de forma inequívoca la historia de ambos países desde siglos atrás. Cabe recordar que Estados Unidos -tal y como lo conocemos hoy- se fundó en el s. XVIII, concretamente el 4 de julio de 1776, cuando las trece colonias británicas que había antaño se separaron de Gran Bretaña.
Es más, entre los regalos que se han intercambiado por este viaje de Estado, el monarca de 76 años obsequiaba al mandatario (79) con un volumen encuadernado a mano y en cuero que conmemora el 250º aniversario de la Declaración de Independencia. Por su parte, el anfitrión recibió de su ilustre huésped una réplica de la espada de Eisenhower, que representa la histórica colaboración de ambas naciones para la victoria conjunta en la Segunda Guerra Mundial.
Volviendo a la Royal Collection, una profesional experta ha explicado a los Trump los secretos que esconden estas increíbles joyas, cuya exposición estrella de la temporada es la casita de muñecas de la reina María de Teck. Señalar que, como muchas de las residencias reales británicas, el Castillo de Windsor normalmente está abierto al público y funciona como reclamo turístico. Desde los Apartamentos de Estado hasta las impresionantes vistas en The Long Walk, cualquiera que pase por este enclave quedará seguro maravillado al primer vistazo.
Homenaje a Isabel II
A continuación, el líder republicano y su esposa se han desplazado en coche oficial a la Capilla de San Jorge para depositar en privado y de manera solemne una corona floral sobre la tumba de Isabel II, a la que conocieron personalmente durante su primer viaje oficial a Reino Unido en 2019. A su llegada, Donald y Melania Trump eran recibidos por el reverendo Christopher Cocksworth, deán de Windsor, y la secretaria, Charlotte Manley.
El enorme aprecio que tenía el presidente de EE.UU. por la madre de Carlos III quedó reflejado tras morir esta en septiembre de 2022, cuando el político y magnate aseguró en un comunicado sentirse "profundamente entristecido" por su fallecimiento. Alabó, a su vez, el "legado de paz y prosperidad" que la soberana había dejado en Gran Bretaña, gracias a su "liderazgo y diplomacia perdurable". Incluso, en lo personal, destacó "su generosa amistad, sabiduría y maravilloso sentido del humor".
Antes de terminar dicha visita por la capilla, los Trump han presenciado la actuación de un coro religioso juvenil, inmortalizándose en una foto de grupo con los niños y niñas que lo componen y bromeando con ellos. Después, hicieron un breve recorrido por este lugar donde descansan los restos de once reyes. Ahí, se les mostró la bóveda de Enrique VIII y la placa de Winston Churchill cuando este fue nombrado Caballero de la Orden de la Jarretera en abril de 1953.
Espectacular desfile militar
Después de ese momento tan íntimo y emotivo que se ha vivido frente al sepulcro de Isabel II, los Reyes y sus invitados han asistido a un encuentro con familias de militares británicos y estadounidenses. Acompañados también por el primer ministro Keir Starmer y la esposa de este, Victoria, es ahí cuando han presenciado sobre la verde explanada una espectacular ceremonia conocida como Beating Retreat. Se trata de una tradición que se reserva para ocasiones muy especiales, como la fiesta nacional, aniversarios de los regimientos o eventos con fuerte carga simbólica.
El desfile contará con unos 1.300 efectivos militares, incluyendo 120 caballos y 200 músicos de las Fuerzas Armadas de Reino Unido. También una potente exhibición aérea de los 'Red Arrows', el equipo acrobático de la Royal Air Force (RAF) que surcará los cielos y los teñirá de color con sus estelas. Ya por la noche, llegará posiblemente el que es uno de los momentos más esperados de este primer día, cuando se ofrezca un cena-banquete de gala donde el monarca y Trump pronunciarán sendos discursos al comienzo del mismo.
* Actualizándose