La Duquesa de Cambridge se encuentra en el epicentro del rumor desde el pasado fin de semana. La prensa inglesa destapó la repentina enemistad entre la esposa del príncipe Guillermo y la aristócrata Rose Hanbury. Una historia que, según los últimos coletazos, bien puede haber sido fabricada para desprestigiar a la Duquesa.
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Difícil de navegar este mar de rumores que durante unos días ha anegado a la Duquesa de Cambridge. Este fin de semana provocaba la marejada la noticia de que la Duquesa se había enfadado con una de sus íntimas amigas, Rose Hanbury, Marquesa de Cholmondeley, que fue su anfitriona en una cita de glamour de 2016. La “terrible pelea” en la que habría estado involucrado el príncipe Guillermo ocupó titules, aunque en ningún momento se reveló el motivo real de su enfrentamiento. Porque la realidad era bien diferente: ni se han peleado, ni se han distanciado, ni eran tan amigas.
Ayer el experto de realeza Richard Kay defendió en Daily Mail que la Duquesa estaba siendo víctima de una campaña de descrédito: “Los rumores son falsos y también puedo revelar que ambas partes han considerado emprender acciones legales, aunque han optado por ignorarlos”. Ambas damas se sentirían perjudicadas por los rumores, mientras que sus maridos no sabrían si reír o quejarse, según sus fuentes. Más allá de si habría habido o no enfado, Richard Kay sostenía que los Cambridge y los Cholmondeley nunca han sido íntimos. Esta supuesta rivalidad comenzó a comentarse en cenas sociales a fines del año pasado para degradar la imagen de la popular Duquesa de Cambride.
El rumor no habría llegado tan lejos sin una rival a la altura. La exmodelo de 35 años siempre ha tenido enorme poder de seducción. Sus ojos azules, su estilizada figura, su elegancia, su desenvoltura y su personalidad transgresora conquistaban a los caballeros aunque, de todos sus admiradores, Rose Hanbury eligió a David Rocksavage, el Marqués de Cholmondeley, veintitrés años mayor que ella, con quien lleva diez años casada.
Con tres hijos, los gemelos Alexander y Oliver de 10 años y la pequeña Iris de 3 años, la pareja vive en Houghton Hall, una mansión en Norfolk, a solo unos kilómetros de Anmer Hall, la residencia de campo donde residen los Duques y sus tres hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis. Lejos de haber pasado mucho tiempo juntos, como se ha dicho, las dos parejas se habrían visto solo en tres ocasiones. Aunque Rose Hanbury y su esposo se encontraban entre los invitados a la boda de los Duques de Cambridge en 2011, no serían amigos íntimos. Y sin el pilar de la amistad, la terrible pelea no se sustenta.
