Aunque las cosas de palacio van despacio, todo llega. En Buckingham, también. Su reconciliación ha sido un secreto a voces durante varios meses, pero, finalmente, el [príncipe Guillermo] y Kate Middleton se han mostrado al mundo juntos de nuevo. Ella, radiante como nunca, y él, con la vista algo nublada, fueron capturados por las cámaras de los paparazzi cuando abandonaron su club nocturno favorito, Boujis, a las dos de la madrugada de ayer.
Juntos, de regreso a casa, y con anillo Son sus primeras fotografías juntos desde que anunciaran su separación en abril. En este tiempo, habían sido constantes los rumores acerca de que seguían viéndose y de que habían sido descubiertos en alguna de sus románticas citas prodigándose un derroche de besos, abrazos, caricias, y más besos y más abrazos, pero la pareja se había esforzado enormemente en evitar ser vista en público y no existía confirmación gráfica de tales apasionados encuentros. Ahora, se han dejado fotografiar por los paparazzi cuando se dirigían a casa en el mismo coche después de una noche de copas. Un avance que encenderá la mecha de las especulaciones acerca de su futuro.
Cada uno de los movimientos de la pareja está estudiado al detalle. Así que el hecho de que se hayan sentido suficientemente relajados como para dejarse ver juntos disfrutando de la noche londinense ha sido interpretado por algunos expertos reales como un indicio de aperturismo acerca de su relación. Como guinda de este pastel, que ha sido para los medios de comunicación su primera aparición juntos, Kate lucía un anillo en su mano izquierda. Aunque lo llevaba en el dedo corazón y no en el anular como sería lo propio en caso de compromiso, lo cierto es que, al ver la fotografía, muchos se plantearán inevitablemente la pregunta de si está en sus planes una boda.
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