Kate Middleton asiste con su familia a la graduación de Guillermo, en Sandhurst

Los Middleton, 'invitados de honor' del Príncipe

Por hola.com

La Casa Real es un hervidero de rumores y son muchos los empleados que apuestan por el compromiso de Guillermo y Kate en Sandringham por Navidad. Y Los británicos, aunque creen que Guillermo estaba realmente convencido de que no se casaría antes de cumplir los 28 años, empiezan a pensar que existe de verdad la posibilidad de que en breve se anuncie el compromiso real.
La presencia de Kate, que llegó a la academia acompañada de su madre, Carole; de su padre,Michael, y de su hermano, James, para asistir a la graduación de Guillermo en Sandhurts como segundo teniente del Ejército británico, ha sido el firme detonante para que, desde esta misma mañana, toda Inglaterra empiece a creer que pronto habrá otra boda real en Gran Bretaña.
El hecho de que Kate haya sido invitada a esta ceremonia en la que han participado 465 soldados -entre ellos, setenta y ocho mujeres- marca en su relación un antes y un después. Por primera vez y, aunque ha aparecido en otras ocasiones al lado de la Familia Real,la novia de Guillermo ha sido invitada a un acto público al que también asistía la Reina y lo ha hecho, acompañada de los suyos, y ante los ojos del mundo.
El universo parece conspirar a favor del joven Príncipe. Ayer mismo, después de una investigación oficial de casi tres años, millones de seguidores de la Princesa de Gales descubrían, a través de Lord Stevens, ex comisario de Scotland Yard, que no había conspiración en el accidente de Diana y que la Princesa ni estaba embarazada ni pensaba casarse con Dodi Alfayed... Su madre, finalmente, podrá descansar en paz.

Los Windsor entran en buena racha
Pero a este regalo de Navidad se ha unido otro. Ya no hay duda alguna de que la Reina de Inglaterra ve a Kate como la mejor candidata para dar un sentido y un futuro a su dinastía. Puede que no lo diga con palabras, pero sí con gestos como el de hoy permitiendo que la novia de su nieto rompa con un protocolo histórico de una manera natural. Con las cámaras de televisión filmando cada uno de sus pasos; en su real presencia y ante los ojos del príncipe Felipe de Edimburgo, del Príncipe de Gales y de la esposa de éste, la duquesa de Cornualles.
Todo parece ir muy bien y ya nadie duda de que los Windsor han entrado en buena racha. Después de unos años tan duros y tan dolorosos, la hora de las buenas noticias parece haber llegado a Buckingham palace y Clarence House.