El príncipe Harry abandona Inglaterra

Por hola.com

Tal y como estaba previsto, y dejando atrás la escuela de Eton, en la que cursó sus estudios secundarios hasta este verano, el príncipe Harry ha viajado a Sydney para disfrutar de tres de los 12 meses sabáticos a los que, siguiendo la tradición de la Familia Real inglesa, todos los Windsor tienen derecho antes de entrar en una nueva etapa de formación en su vida.
Así, y al igual que hiciera su hermano Guillermo, Harry ha puesto en marcha el sueño que tanto tiempo lleva preparando. Acompañado de Dyer (ex oficial de la guardia galesa) -la persona que viajó con Guillermo a Chile y a África y, también, el hombre de confianza del príncipe Carlos- Harry vivirá en una granja de ovejas y vacas, en Outback, en el rancho de un banquero suizo, íntimo amigo de su padre, Urs Schwarzenbach; jugará a polo -visitará a Kerry Packer, millonario australiano y patrocinador internacional de este deporte- y, por supuesto no se perderá el partido de Inglaterra en la Copa del Mundo de Rugby. A cambio, el príncipe, sólo tendrá que asumir dos compromisos oficiales en todo este tiempo: uno de ellos como capitán del equipo "Ambassador´s Cup" que jugará la final en Australia; y el segundo presentándose a una sesión de fotos que tendrá lugar esta semana en el puente de Sydney Harbour.

La fiesta de despedida
Después del largo viaje y sin muestras de cansancio el Príncipe, ya instalado en la capital australiana, posó para los fotógrafos con un pequeño Koala en brazos del Zoo de Sydney, charló con un grupo de estudiantes, e incluso bromeó con los fotógrafos tratando de que uno de los canguros mirara a las cámaras de la misma forma en la que él lo estaba haciendo.
La llegada del príncipe Harry a Australia (tan tranquilo, tan sereno) fue todo lo contrario, sin embargo, de su salida de Gran Bretaña. Imborrable para todos ya la fiesta que éste organizó por todo lo alto a modo de despedida.

un final de verano con sabor especial
Primero en So Bar, un sofisticado lugar en Chelsea propiedad de su amigo y "guardián" Mark Dyer, el mismo que le acompañó durante su visita a un centro de drogodependientes, después de que éste fuera descubierto fumando marihuana... y, finalmente hasta las tantas de la madrugada en trendy Purple Club, con música Funkie de los años 70.
Hacía muchos años que Harry no celebraba un encuentro tan especial con su círculo de amigos -la celebración de los aniversarios de la muerte de su madre a finales de agosto, estan demasiado próximos a la fecha de su cumpleaños, el 15 de septiembre- y por una vez quiso que este final de verano -seis años ya desde la desaparición de la princesa Diana- tuviera un sabor especial. Por un lado, el inicio de un año sabático; por otro, el haber pasado con éxito notable las pruebas de acceso a la academia militar de Sandhurst para seguir la carrera militar.