La crisis provocada por el coronavirus ha hecho que las Casas Reales se vuelquen con sus compatriotas. Con las medidas de confinamiento decretadas en Europa, son muchos los Reyes que han seguido su agenda desde Palacio con videoconferencias y pequeñas reuniones, pero también han sido muchos los que han querido conocer de primera mano la labor de sanitarios y organizaciones benéficas que se están llevando a cabo para ayudar en la pandemia. Además, algunos de ellos han querido dar personalmente su agradecimiento a entidades como la Cruz Roja, que estos días está haciendo una gran labor llevando alimentos a las familias más necesitadas.
Este ha sido el caso de Máxima de Holanda que ha estado con los voluntarios de la Cruz Roja en Loenen, un municipio en la provincia de Utrecht, que está haciendo una labor fundamental durante el brote de COVID-19