Don Felipe y doña Letizia continúan con su viaje de Estado a Egipto, país con tal potencial histórica y arqueológico que sus maravillas no podían quedar al margen. La visita privada de la que disfrutaron la noche del miércoles en las pirámides de Guiza ha sido solo el aperitivo de lo que les espera en su tercera jornada.
Este jueves comienzan su agenda por separado. El Rey inaugurará un foro empresarial y mantendrá encuentros con el secretario general de la Liga de los Estados Árabes y con el primer ministro egipcio, Mostafá Madbuli, mientras que la Reina visitará la Fundación Sultán en la Ciudad de los Muertos. Pero la parte más visual de su visita llegará a última hora de la tarde.
Cerca del Valle de los Reyes, en Deri al Bahari se alza el célebre templo dedicado a la única mujer que llegó a gobernar Egipto con título de faraón. Su figura, excepcional en una civilización dominada por reyes varones, se refleja en este conjunto monumental que impresiona tanto por su arquitectura como por su valor simbólico. Los Reyes inaugurarán la nueva iluminación del templo Hatsheputsut, por lo que se esperan auténticas maravillas fotográficas a la altura de este coloso conocido como "la maravilla de las maravillas".
El templo se compone de tres amplias terrazas artificiales que ascienden hasta fundirse con los acantilados del desierto, creando una de las estampas más sobrecogedoras del Antiguo Egipto. Además, está decorado con relieves que narran episodios de su reinado y con altares dedicados a divinidades como Ra, Anubis o Amón. Inevitable recordar aquella mítica imagen de Melania Trump ante las pirámides de Giza. Las fotos de los Reyes antes el complejo monumental no han sido como aquella de 2018, pero la factura visual de esta cita promete y quizás podría regalarlos otra icónica estampa.
El viernes continuarán su periplo por algunos de los parajes más espectaculares de Egipto como el Museo de Luxor o el Valle de los Reyes, donde recorrerán excavaciones arqueológicas lideradas por investigadores españoles. En este lugar situado en la orilla contraria del Nilo, fueron enterrados miembros reales de las dinastías XVIII, XIX y XX del Imperio Nuevo. Su situación no es casual, la mayoría de los enterramientos en el Antiguo Egipto estaban situados en la orilla oriental del río, porque es en el occidental donde el dios Ra se situó para renacer. El complejo lo forman un total de 60 tumbas repartidas de este a oeste, siendo la parte oriental la de mayor relevancia. Las más visitadas son las de Tutmosis I, Tutmosis II, Ramsés VI, Ramsés IX, Seti I, Mrenptah, Amenofis II o Amonhotep II. También encontramos aquí la tumba de Tutankamón, cuya entrada para visitarla se compra por separado del resto. Muchos de los objetos del ajuar funerario, sin embargo, están siendo trasladados al Gran Museo Egipcio de Giza, para mostrar la colección completa de sus tesoros.
El Museo de Luxor alberga una colección cuidadosamente organizada de estatuas, relieves y artefactos procedentes de los templos de Karnak, Luxor y Deir al-Medina, así como piezas de tumbas de la orilla oeste del Nilo. Entre sus joyas destacan objetos de Tutankamón y estatuas de faraones de la dinastía XVIII que ayudan a comprender la vida religiosa y cotidiana del Antiguo Egipto.
Este viaje de Estado de los Reyes se enmarca dentro de las excelentes relaciones que mantienen ambos países y representa toda una oportunidad para continuar estrechando los profundos lazos históricos, políticos, económicos, culturales, científicos de cooperación y humanos existentes entre Egipto y España.