Dinamarca se prepara para el próximo bautizo de la princesa sin nombre

La segunda hija de los futuros reyes daneses, Federico y Mary, recibirá las aguas bautismales en una ceremonia de carácter familiar el próximo día 1 de julio

Por hola.com

Dinamarca se prepara para el bautizo de la segunda hija de los príncipes herederos Federico y Mary, nacida el pasado 21 de abril en el Hospital del Reino de Copenhague. Al igual que ocurrió con su hermano mayor Christian, la Casa Real danesa no hará público los nombres que recibirá hasta el momento mismo del bautizo, lo que ha dado paso a numerosas especulaciones.
La Casa Real danesa tampoco difundirá la lista de invitados hasta el mismo día del bautizo, ni el nombre de los padrinos, aunque se espera que sea una celebración mucho más familiar e íntima que la del bautizo de Christian el 21 de enero de 2006, a la que acudió toda la Dinamarca "oficial" e innumerables miembros de la realeza. En este sentido, ha sido la Casa Real noruega la que se ha encargado de confirmar que los príncipes Haakon y Mette-Marit sí acudirán al bautizo.
La propia elección del templo -la capilla del Palacio de Fredensborg en vez de la iglesia del Palacio de Christiansborg- alude a las intenciones de la familia sobre el carácter de la ceremonia.
Salvo una improbable ruptura con la tradición, la princesa llevará el mismo traje bautismal que su hermano y que originalmente fue diseñado para el bautizo en 1870 de su tatarabuelo, el príncipe Christian (luego Christian X), por orden de su madre, la reina Luisa, princesa de Suecia y esposa del rey Federico VIII. Desde entonces, casi todos los miembros de la realeza danesa lo han lucido en sus bautizos: Federico IX, su hermano, el príncipe Knud; la reina Margarita II; sus hermanas, Benedicta y Ana María; el príncipe heredero Federico; el príncipe Joaquín y el príncipe Christian.

Un diseñador lituano vestirá a la Princesa Mary
También de acuerdo con la tradición, se utilizará el juego bautismal empleado para estas ocasiones desde 1671, para el bautizo del que luego sería Federico IV. Se trata de una pila bautismal fabricada en Hamburgo en 1660 por los orfebres Gödert Bodtstede y Christian Mundt, hecha de plata y parcialmente recubierta de oro que será transportada desde el Palacio de Rosenborg, donde se encuentra habitualmente, a la capilla de Fredensborg. Completan el conjunto una fuente, una jarra para el agua y dos candelabros de oro.
Desde 1671 a 1749, el nombre del niño bautizado fue grabado en la parte inferior de la fuente, lo que incluye 22 nombres. Cuando no hubo más plaza, se pasó a grabarlos en un plato de oro que se fijó a la bandeja. Ahí figuran otros 7 nombres, que comprenden el período de 1750 a 1795, año en el que se puso fin a la histórica costumbre.
El obispo de Copenhague, Eric Norman Svendsen, será el encargado de oficiar la ceremonia. (El mismo sacerdote que casó a los príncipes Federico y Mary y bautizó a Christian).
La princesa Mary lucirá para la ocasión un traje del diseñador lituano Juozo Statkeviciaus, de cuyo trabajo quedó admirada la princesa durante una exhibición de pieles en Copenhague. Juozo ya viajó el pasado mayo a Copenhague para mostrarle algunos diseños.
Tras la ceremonia, se celebrará un banquete en la Casa de la Chancillería de Fredensborg, al que acudirán la familia y los amigos más allegados.