Estaba prevista para abril

Así ha sido la ancestral (y austera) ceremonia con la que Akishino de Japón ha sido proclamado heredero

Tras meses de aplazamiento por la crisis del coronavirus, el hermano del emperador nipón ya es oficialmente el primero en la línea sucesoria

Por L.F.S.

Estaban previstos grandes fastos para la proclamación del príncipe Akishino como heredero del trono imperial, que debía haberse celebrado en abril. Sin embargo, la pandemia frustró los planes y obligó no solo a retrasar esta milenaria tradición, sino también a hacerla mucho más austera para respetar las nuevas normas sanitarias e higiénicas. Finalmente, el hermano menor de Naruhito de Japón, junto a su esposa, la princesa Kiko, ha sido declarado oficialmente primero en la línea sucesoria y lo ha hecho en una ceremonia mucho más breve y reducida de lo habitual, pero en la que se han respetado las costumbres ancestrales de este ritual, llamado Rikkoshi no Rei.

El tradicional rito de Naruhito de Japón y su familia para homenajear al emperador más revolucionario

Aunque es heredero de facto desde que su hermano asumió el trono del Crisantemo en mayo del año pasado, la proclamación oficial se realiza más adelante y debe hacerse través del rito milenario correspondiente. En la retina ha quedado la espectacular entronización de Naruhito, que congregó a miembros de las casas reales de todo el mundo, y aunque este acto no tiene tanta envergadura, la Casa Imperial no suele escatimar en celebraciones y tampoco es amiga de alterar las tradiciones. Sin embargo, la salud obliga y, de igual manera que se tuvo que cancelar el discurso público del emperador con motivo de su cumpleaños, en esta ocasión también ha sido fundamental adaptarse para poder llevar a cabo al menos la ceremonia en la que el príncipe recibe la espada imperial. 

VER GALERÍA

Akishino y Kiko de Japón, ataviados con los kimonos naranjas que forman los trajes tradicionales llegaban al palacio imperial ante unos 50 invitados, según ha informado la agencia Kyodo News, en lugar de los 750 que se esperaban en un principio. El heredero ha pronunciado un discurso en el que ha jurado cumplir con sus deberes reales, al que le han seguido unas palabras del emperador, así como la felicitación del primer ministro Yoshihide Suga, llamada Yogoto. Llegaba entonces el momento de la ceremonia Rikkoshi no Rei por la que Akishino ha sido nombrado Koshi tras recibir la espada imperial como símbolo de su estatus en un ritual de unos 15 minutos celebrado en la sala Matsu No Ma. Koshi es el título que reciben los herederos que no son hijos del reinante. En el caso de Naruhito o Akihito, en su momento fueron declarados Kotaishi. 

VER GALERÍA

VER GALERÍA

VER GALERÍA

Tanto el desfile como los banquetes han sido cancelados. Habitualmente se organizan tres buffets en dos días y en un principio se pensaba dejar en dos en una sola jornada, pero finalmente todo ha quedado en una comida de agradecimiento del príncipe con su hermano. Por la tarde, ha tenido lugar el Choken No Gi, como se conoce a la primera audiencia del recién proclamado heredero y a su esposa, Kiko, con los emperadores, Naruhito y Masako, en la que les agradecen de nuevo la proclamación. Para la ocasión, los dos matrimonios han vestido el traje de gala.

Akishino, de 54 años, y la princesa Kiko tienen dos hijas, Kako y Mako, y un hijo, Hisahito. Pese a que el niño, de 13 años, es el benjamin de la familia, ahora que su padre ya se ha proclamado oficialmente heredero, él pasa a ser el segundo en la sucesión al trono, puesto que en Japón impera la ley sálica. Debido a esta misma normativa, Aiko, la hija de los actuales emperadores, no es la heredera, si no que la sucesión recae en el hermano de Naruhito.