Dos días después de que su presencia en un festival gay de Suecia fuera interpretada por la mayoría de la prensa europea como una "posible salida del armario" o un reconocimiento indirecto de su comentada homosexualidad, el príncipe Alberto de Mónaco decidió conceder una entrevista, en exclusiva, al diario Expresen para explicar las verdaderas razones que le habían llevado hasta la ciudad de Åre (donde tuvo lugar la cita cinematográfica). Asimismo, el Príncipe, sin zapatos, y vestido con una sencilla camisa y unos vaqueros, habló por primera vez de Alicia Warlick, su supuesta novia oficial, y de las mujeres suecas.
'No tengo nada que esconder'
¿Se lo ha pasado bien en Åre? `Realmente, sí . Hemos tenido unos momentos maravillosos. Había estado antes, pero como miembro del Comité Olímpico Internacional. Ha sido fantástico volver, practicar esquí y descender las pistas en las motos de nieve... Porque yo no estoy aquí por el festival gay... Ni tengo nada que esconder. No obstante, quiero dejar claro que la amabilidad no incluye tener que hablar de mis vacaciones privadas. Si no es oficial, no suelo contar dónde estoy o lo que hago... Y mis visitas a Suecia suelen ser de carácter privado´.
¿Sabía que había un festival gay en Åre?
'No. Uno de mis amigos lo había organizado todo con la intención de que nos lo pasáramos bien. Eso fue todo. Reservó una mesa en un club nocturno donde podíamos bailar y... para mí fue una enorme sorpresa encontrarme con que iba a haber un show de drag queens. Claro que, tampoco le di mayor importancia. Vi un poco del espectáculo y más tarde salí a bailar. Nunca viajaría mil kilómetros para ir a una fiesta gay'.
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