Es una infección localizada en la faringe y las amígdalas palatinas causada por virus Coxsackie del grupo A. Estos virus pertenecen al amplio grupo de los enterovirus, los cuales ocasionan infecciones muy frecuentes en los niños, afectando prácticamente a todos sus órganos y sistemas.
Los enterovirus constituyen una causa común de infecciones en la infancia, que van desde la meningitis aséptica a enfermedades febriles inespecíficas. Las manifestaciones clínicas comprenden: la herpangina, conjuntivitis, resfriados, faringitis, hepatitis, síndrome mano-pie-boca, encefalitis, gastroenteritis, pericarditis, miocarditis y hasta poliomielitis. Estos virus son muy resistentes y mantienen su actividad durante días o semanas. Se transmiten de persona a persona y por vía respiratoria o vía fecal-oral, especialmente en los niños, y su periodo de incubación es de tres a seis días.
Las infecciones por virus Coxsackie pueden manifestarse casi de forma asintomática, que no necesitan tratamiento, o provocar grave sintomatología y necesitar de cuidados médicos específicos
¿Los enterovirus producen infecciones graves en los niños?
Los virus Coxsackie, cuando afectan a las vías respiratorias del niño, pueden dar lugar a faringitis, estomatitis, parotiditis, herpangina, laringitis, bronquitis o neumonía. La gravedad de los síntomas estará en relación con la agresividad del virus y el nivel de inmunidad del huésped. Por ello estos cuadros pueden manifestarse casi de forma asintomática, que no necesitan tratamiento, o provocar grave sintomatología y necesitar de cuidados médicos específicos.
© Getty Images¿Qué es la herpangina?
Es la infección de las amígdalas palatinas ocasionada por el virus Coxsackie A. Se manifiesta con fiebre elevada, úlceras y vesículas bucales rodeadas de eritema en las amígdalas, la faringe y el paladar, aumento de la salivación y rechazo del alimento, con una duración de 3 a 6 días.
La evolución normal es hacia la curación espontánea, pero precisa de tratamiento de sostén, actuando sobre los síntomas bucales y faríngeos con antisépticos, enjuagues y gargarismos y aliviar la repercusión que produce sobre la alimentación del niño.
Síndrome Boca-Mano-Pie
Es una enfermedad infecto-contagiosa, aguda y estacional, muy frecuente en guarderías y escuelas y que está producida por el virus Coxsackie A16. Se caracteriza por la aparición de úlceras bucales de pequeño tamaño localizadas en lengua y paladar asociadas a lesiones maculares, vesiculares o eritematosas localizadas en manos y pies. Todo ello acompañado de fiebre de variable intensidad.
Afecta sobre todo a niños pequeños, menores de 5 años. Es una enfermedad de pronóstico favorable. Dura alrededor de una semana, no precisa de tratamiento específico y sí de tratamiento sintomático. Controlar la fiebre, mantener un buen estado de hidratación y vigilar la alimentación es lo recomendado.
