Un repelente de mosquitos, si tienes niños pequeños, debe convertirse durante estos meses estivales en uno de los productos que incluir en tu botiquín. Sin embargo, nos surge la duda de cuáles son aptos o no para la piel de los más pequeños. Del mismo modo que nos ocurre con las cremas de protección solar. No sabemos por qué, pero la piel de los bebés suele ser el blanco de muchos insectos, en especial, de los mosquitos. Si tienen que elegir entre un adulto y un niño, parece que todos eligen a este último.

El incremento del tiempo que pasamos al aire libre, que acudimos a zonas con mucha más humedad, nos hace tener que preocuparnos aún más por estas cosas. Pero, ¿son realmente seguros y recomendables? La respuesta es que sí, pero tenemos que atender a la composición del producto y la edad de nuestros hijos. No es lo mismo en un bebé de menos de dos meses que en otro que está cerca ya de los dos años.

¿Cómo elijo los productos antimosquitos para mi hijo?

Todos los repelentes o protectores de insectos tienen en común que se aplican sobre la piel o sobre la ropa, interfiriendo en los receptores químicos de los insectos, impidiendo que estos averigüen dónde está nuestra piel y, por tanto, no puedan acertar a picarnos. Sin embargo, no todos los productos son adecuados para los bebés. Para ello, deben especificar que están homologados para uso infantil.

La gran mayoría de los productos que se venden como repelentes de insectos consiguen evitar el ataque de mosquitos, garrapatas, pulgas y moscas, pero no de abejas o avispas, es decir, de aquellos que tienen aguijón. Y ninguno te previene, por supuesto, de una posible reacción alérgica. Ante la gran gama de productos, lo importante es fijarnos:

• En su composición, pues su principio activo determina a qué edad se puede aplicar. Debemos distinguir entre repelentes, que contienen compuestos químicos y, por tanto, estarán más limitados en su uso para los más pequeños, y protectores de insectos, que son naturales y no incluyen fórmulas biocidas, mucho más recomendables para los menores de 12 meses.
• En su formato, pues pueden ser aerosoles, barras, cremas o líquidos.

Bebés de 0 a 12 meses, ¿qué repelente de mosquitos utilizo?

Para los bebés menores de un año la recomendación general es la de no aplicar un repelente de insectos de manera directa sobre la piel, sino aplicar una pequeña cantidad sobre la ropa o el lugar en el que nos movamos con nuestro pequeño, como la silla o el cochecito, además de hacer uso de mosquiteras portátiles, impregnadas de la misma forma.

Para ellos, se pueden utilizar aceites esenciales de plantas -como la citronela, el eucalipto o el cedro- que son eficaces contra las picaduras, aunque con un tiempo de protección bastante corto, nunca superan las 2 horas desde su aplicación. Es lo que hemos llamado protectores de insectos. Eso sí, nunca se debe utilizar en menores de 2 meses, pues puede producir irritaciones, sobre todo, si también tiene un componente alcohólico.

Repelentes de insectos para bebés entre 1 año y 2 años

En este caso, priorizaremos también el uso de mosquiteras portátiles impregnadas con repelente de mosquitos, evitando su uso directo sobre la piel de los más pequeños. En el caso de querer utilizarlos, hay que elegir aquellos cuyo compuesto principal sea el IR3535, el único recomendado para esta edad con una eficacia variable entre las 6 y las 8 horas. Es un compuesto sintético que actúa, sobre todo, en mosquitos y garrapatas. Su toxicidad es mínima, aunque todo dependerá de la concentración del producto.

Entre ellos, estarían: Goibi Infantil Spray, Relec Infantil y Antimosquitos Isdin Pediatrics.

Repelentes de insectos a partir de 2 años

A partir de este momento, ya podemos elegir repelentes de insectos con otros compuestos, además del IR3535, como son los compuestos por DEET o Picardin/Icardin, el más utilizado a nivel mundial. Su duración y eficacia es muy variable. La gran mayoría de estos productos utilizan estos dos productos.

Con respecto al Picardin o Icardin, se considera seguro, incluso, para los bebés a partir de 2 meses y, siempre que se sigan las instrucciones de uso, aunque la Asociación Española de Pediatría (AEP) solicita esperar hasta los 6 meses de edad para su aplicación. Sin embargo, en el caso del DEET, un compuesto químico muy habitual en todos los repelentes de insectos, la Organización Mundía de la Salud (OMS) recomienda que no exista más de un 20% de esta sustancia en ningún producto. Por ello, la AEP pide evitar su uso en menores de 2 años.

Entre ellos, estarían: Goibi Familia Spray, Elinwas, Autan Care o Relec Fuerte.