Llega un momento en la vida de todos los niños y niñas en que deben cambiar de etapa. Comienzan a ser un poco más adultos. Un momento que puede ser algo complicado y con situaciones que no llegan a entender bien. Los códigos de interpretación de los niños están a medio camino entre uno mundo y otro (el infantil y el adulto). Esto hace que aparezcan la frustración, la vergüenza y el miedo. Sentimientos que merman su autoestima emocional y que, como padres, debemos trabajar conjuntamente.

Para ello, hemos querido hablar con la escritora alemana Alma Gross, autora del best seller que está ayudando a millones de niños y padres a descubrir por qué son especiales y, a partir de ahí, reforzar su autoestima. Que, al final, es lo que buscamos.

¿Cuáles son los problemas que más asustan o preocupan a los niños que se encuentran en esta etapa?

Fundamentalmente, los cambios en situaciones sociales. Es decir, no saber interpretar todo lo que les sucede en esta nueva fase, ser capaces de hacer lo correcto. Les preocupa elegir el momento adecuado para saber interactuar y relacionarse tanto con otros niños como con los adultos que les rodean.

En Por qué eres especial (Montena), además, la autora hace una enumeración de los problemas que más les afectan durante esta etapa de la niñez a la vida adulta:

1. Aparecen nuevos miedos, también el pudor y la vergüenza.
2. Aumenta su necesidad de intimidad, pues se mantienen en un momento de descubrimiento.
3. Tienen grandes deseos de agradar, a toda costa, a su grupo de amigos. El sentirse incluido.
4. Fluctúan entre la alegría y la tristeza más profunda.
5. Se dan las primeras comparaciones entre ellos y los demás.

Trabajando estos cinco puntos, como nos cuenta la autora, “podemos ayudar a los padres a gestionar emocionalmente los cambios que acusan los niños en esta etapa, a través, precisamente, de una buena autoestima”.

Cómo trabajar la autoestima emocional de nuestros hijos

En el libro, su protagonista, Marie, tiene una larga y madura conversación con su madre en la que le plantea este tipo de problemas. Su madre, que quiere ayudar a su hija, le intenta hacer ver que ella misma tiene herramientas intrínsecas que le pueden servir para afrontar esta nueva etapa. Pero, ¿cuáles son esas herramientas? Como nos dice Alma Gross:

• Poner el foco en sus virtudes, en esas pautas personales que marcan la diferencia y que, como asegura el título del libro, “esas que le hacen ser una persona especial”.
• Hacerle sentir orgulloso de ser quién es.
• Enseñarle a desarrollar sus destrezas y habilidades para poder cumplir sus metas. Este punto, como asegura la escritora, “es bastante complicado, pero lo importante es que debemos ser un modelo a seguir para los niños y mantenernos positivos en cada uno de los argumentos que le demos”.

Así, “la madre, a través del diálogo, muestra su amor y trata de reafirmar a su hija como persona. Las herramientas fundamentales son los ejemplos en situaciones reales de la vida, cotidianas, que se viven con los demás como, por ejemplo, la abuela de la niña, etc”.

En definitiva, su protagonista “reconoce su valía en el día a día”. Esto es lo que hay que reforzar. “Reafirmarnos incluso nosotros en que el niño puede lograrlo todo y reafirmar también su seguridad propia”.