"Yo nacida en el norte llevaba años en Madrid luchando por mi sueño, bailar. Pero la vida en ocasiones tiene otro camino preparado para nosotros, después de 8 años una lesión muy dura, el amor por mi tierra y un dolor en el pecho incalculable me hicieron volver a casa. Con tan solo 22 años decidí cambiar de camino. Verano de 2015, playa de la Zurriola. Intentaba abrir el corazón de nuevo, y paseaba con un chico que de alguna manera sería más importante de lo que yo misma podía imaginar, no, no por ser el definitivo, pero sí fue quien se encargó de ponerme en contacto con Iker. En aquel paseo este chico se paró a saludar a un amigo, Iker. Desde ese momento no pude parar de pensar en él", explica.
- Sencillos y muy favorecedores: 9 vestidos de novia de Pronovias que te van a enamorar