Todo lo que debes saber para que tu aperitivo de boda sea memorable

Claves de cinco caterings expertos para que se convierta en la mejor carta de presentación

Por Estrella Albendea

La ceremonia de una boda es, sin duda, el momento más simbólico de todos, repleto de emotividad y significado, pero el comienzo de la celebración no se queda atrás en importancia. Cuando comienza el cóctel se abre la puerta a una carta de presentación, en un clima de alegría y encuentro, que ha hecho del aperitivo una pieza clave en el menú de una boda. “Tal vez sea la parte más importante, pues, además de ser el primer impacto en los invitados a nivel gastronómico, es el momento en que se comparte y departe con todos los asistentes. Es un momento de fiesta unido a comida”. Lo explican desde Casa Gerardo, el restaurante y catering capitaneado por el reconocido chef Marcos Morán. Pero no es esta firma la única que nos desvela hoy las claves para construir el aperitivo perfecto: otras cuatro se suman a la lista.

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Distribuir en el espacio

En este clima de reencuentro, apuntan desde Doña Francisquita, se pretende que exista una dinámica para recorrer todo el espacio utilizado: “es cuando más se interactúa, se presentan nuevos conocidos y familiares bajo el nexo común de los contrayentes. Por ello siempre se busca facilitar los movimientos, incluso provocarlos con estaciones de cocina en vivo o comida expuesta, dar así una motivación a los invitados para que haya interlocución también con los miembros del catering”.

Es así como surgen algunas de las tendencias que se han mantenido, temporada tras temporada, como las opciones más atractivas. “Los puestecillos de comida, las bandejas de bebida, los aperitivos en grandes fuentes de loza… Todo tiene que llevar un buen ritmo para que sea lo más atractivo posible”, apunta Rafa Cuevas, responsable de comunicación del reputado restaurante y catering cordobés Bodegas Campos

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Público exigente 

¿Se puede ir un paso más allá a la hora de plantear la idea inicial? La respuesta es sí, porque, además de decidir el estilo de cóctel que busca la pareja, se puede ahondar en una visión más exclusiva. "En Mas de Sant Lleí, nuestro chef ejecutivo Jordi Plancheria, junto al director de la finca de bodas, Evaristo Viana, han asumido el reto de conceptualizar una gran propuesta culinaria disruptiva y crear una experiencia que estimule los sentidos de los asistentes. Una apuesta gastronómica que ofrece un gran valor a la celebración y fomenta el recuerdo que deriva de ella”, introducen desde este espacio y catering catalán. 

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El reto, explica la casa barcelonesa, es estar a la altura de la cultura gastronómica, cada vez con mayor nivel, que apuesta por la alta cocina, la estética y el producto de máxima calidad. Una experiencia que han estudiado al milímetro: “el cóctel de boda es un momento muy interesante para los invitados, para relacionarse con otros invitados, descubrir el espacio y empezar a afianzar su expectativa. En materia gastronómica, la originalidad y la sorpresa crearán una agradable velada. Para el cóctel hemos superado la barrera de lo común, creando una propuesta singular y espectacular; hemos querido romper con los tiempos y presentaciones estructuradas fomentando el dinamismo”. Es la visión de “gastronomía viva”, que nos describe Anabel B. Holanda, Communication Manager de Mas de Sant Lleí.

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La duración ideal

Sea cual sea el estilo de menú que cautive a los novios, el reto comienza escogiendo la duración del aperitivo, que servirá para vehicular el resto de fases del banquete. "Dependerá del tipo de boda queremos realizar. Si queremos una boda todo tipo cóctel lo mejor es que tenga una duración de dos horas con bebidas y aperitivos y dejar 30 minutos posteriores para la parte dulce. Si la boda que queremos es con un cóctel previo a una comida o cena, lo más aconsejable es que el aperitivo tenga una duración de algo más de una hora, ya que el paso siguiente para sentar a los comensales tiene una duración aproximada de quince minutos, y el menú posterior sentados suele tener una duración de dos horas. Para que todo sea dinámico y la gente nunca pierda las ganas de comer, –ya que cuando se alarga muchísimo los tiempos los invitados pierden el apetito–. Para nosotros es importante ofrecer, además, una sobremesa después del menú, la primera copa de licor en mesa”, explican desde UZalacaín Catering

No obstante, se da una tendencia hacia cócteles más largos, de incluso dos horas, frente a las opciones clásicas. “La duración vendrá marcada por el estilo gastronómico de la boda. Es tendencia que los cócteles se vayan alargando para favorecer una reducción de tiempo en mesa. Igualmente, la duración más apropiada parte de la selección del menú. Lo tradicional ha venido siendo una hora y media de cóctel, más dos horas en mesa, y media hora para traslados con discursos y reparto de regalos incluido”, señalan desde Doña Francisquita.

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Sucede, en ocasiones, que existen factores que pueden resultar limitantes a la hora de decidir el tiempo dedicado al aperitivo. Nos los desvelan desde Casa Gerardo: “una boda con menos invitados inevitablemente ha de tener un aperitivo ligeramente más breve. Es importante también el componente climatológico, pues con un día caluroso o a mediodía suelen darse aperitivos más largos. Hay que valorar también cuántos platos se van a tomar después en mesa. No es lo mismo un aperitivo con un menú en mesa de tres platos y postre o con un menú en mesa de un solo plato y postre, por ejemplo”.

En este sentido, para Mas de Sant Lleí no existen los límites, por lo que ofrecen a las parejas la posibilidad de realizar una boda completa tipo cóctel con aperitivo de tres horas y media o incluso disponer de unas estructuras mixtas a medio camino entre un enlace tipo cóctel o con banquete, “diseñadas con nuevas fórmulas que incluyen un aperitivo más largo y un solo plato en mesa”, reconoce Anabel B. Holanda.

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Las claves para acertar

Para que el aperitivo funcione como una presentación de éxito conviene que los novios tengan en cuenta diferentes factores y confíen (eso siempre) en profesionales rigurosos. “Para acertar es necesario hacer un aperitivo divertido, en una ubicación bonita, donde puedan disfrutar tanto de pie como sentados, con espacios para poder hacer fotos durante el aperitivo. En cuanto al servicio, tiene que ser rápido y muy variado, con una especial atención a la bebida, sobre todo en las bodas de verano, y en el sur. Sin olvidar, la amabilidad del personal, explicando a los invitados cada uno de los aperitivos que ofrecen, teniendo en cuenta a las personas con algún tipo de intolerancia, cosa, para nosotros, súper importante”, defiende Rafa Cuevas, de Bodegas Campos.

A ello se suman detalles como la tipología de invitados y la personalidad de los novios, a lo que hacen referencia desde Doña Francisquita; la procedencia del producto y la elaboración del mismo, como indican desde Mas Sant Lleíi o la búsqueda de un equilibrio, que destacan desde Casa Gerardo: “cosas frías y calientes. Alguna fritura sin excesos. Pescados y carne. Algo de verdura siempre es importante tener”. Y un matiz que a veces se pasa por alto, que nos recuerda Mónica Muñoz, directora de UZalacaín La Finca: “lo primordial es que toda la propuesta que se sirva esté concebida para poder tomarse de un bocado, pensando en la comodidad de los invitados”.

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Lo más solicitado

Para concluir, estos cinco caterings expertos nos desvelan sus propuestas más demandadas, esas que llevan años siendo un éxito o las nuevas incorporaciones que cautivan a los asistentes a una boda, sin perder la calidad y saber hacer que los caracterizan. Sin duda, ganan por goleada los puestos en vivo, algo que demuestra que comer, con algo de espectáculo, es una experiencia fundamental en toda boda.

Doña Francisquita

“La incorporación de estaciones de cocina en vivo durante el cóctel es hoy en día lo más solicitado. Desde las tradicionales, cortador de jamón, estación de quesos e ibéricos, sushi, coctelería; a las más novedosas, vermut y encurtidos, ceviches y tiraditos, sopas frías y mini ensaladas, ostras con cava o champán, cocinas del mundo (street food asiático, mexicano, italiano), cocina local, barbacoas (brochetas, mini hamburguesas). Siempre con el afán de sorprender e introducir nuevos productos gastronómicos”.

Más de Sant Lleí

“La cocina propia de Mas de Sant Lleí ofrece una propuesta con gran variedad de contrastes, bocados deliciosos, para poder conversar con los invitados, platillos gourmet, variedad de bufés gastronómicos, cocina en vivo con nuestros cocineros en acción, así como la posibilidad de realizar propuestas adaptadas a la temporalidad de celebración y al origen geográfico de los  invitados. En nuestra propuesta de cóctel ofrecemos cocina fusión, cocinas del mundo, el sabor por la tradición, cocina de vanguardia… Hemos roto con el protocolo clásico, y los tiempos estructurados se han flexibilizado con un servicio de cóctel mucho más vivo y dinámico. 

En la presentación gastronómica en bufés, la cocina en vivo recobra protagonismo el producto. Como novedad, introducimos en nuestra propuesta la figura de estilista culinario para crear la experiencia sensorial del evento. Una de las novedades de esta temporada ha sido el bufé de mar y montaña: las carnes y pescados se presentan ante los invitados a modo de procesión por el aperitivo, en grandes tablas de madera sostenidas en hombros por dos camareros y cocinadas por el chef en horno de brasa en la zona del aperitivo. Uno de los show cookings más demandados en las bodas de 2022”. 

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Casa Gerardo

"Siempre son un éxito los puestos en directo (jamón, quesos, fabada, arroz, pulpo…). Por otro lado, planteamos un aperitivo con productos de nuestra tierra. Nuestros originales bocadillos crujientes de quesos ya son un must y son imitados por toda la geografía. Las croquetas de jamón son un seguro. Y siempre incluimos algún producto premium como anchoas u ostras”.

Bodegas Campos

“En los últimos años, nos solicitan cada vez más los puestecillos de bebida y comida: desde mojitos a mini gintonics, pasando por sushi o empanadas argentinas. Desde gazpachos hasta ibéricos de la tierra. Vivimos en una sociedad súper visual, en la que todo ha de ser ‘fotografiable' y, por ello, hemos puesto en valor la puesta en escena en la presentación de nuestra oferta gastronómica, con la esencia del ‘alma’ que caracteriza la bodega, la casa de la que nació todo en 1908”.

UZalacaín Catering

"Los aperitivos estrella de UZalacaín Catering son el steak tartar y nuestra milhojas de foie caramelizada y manzana, como aperitivos fríos, y como aperitivos calientes no puede faltar la croqueta de jamón y ternera, la brandada de bacalao y el welsh rarebit, todo un clásico de nuestra casa. Siempre recomendamos añadir puestos de comida al momento del aperitivo, algo muy divertido para los invitados. Las ostras es un añadido que está muy en tendencia ahora y el sushi es una opción, también, que gusta a todo el mundo”.