Desvelamos la joya a medida que Karla Covarrubias llevó en su boda con Ramón Hermosilla

Oro envejecido y nueve diamantes dieron forma a este elegantísimo anillo conocido como 'churumbela'

Por hola.com

La primavera de 2022 está siendo la gran temporada de bodas: Isabelle Junot y Álvaro Falcó, Brooklyn Beckham y Nicola Peltz, Belén Barneche y Martín Cabello de los Cobos y Sánchez-Ocaña... La lista de parejas conocidas que han elegido esta temporada para darse el "sí, quiero" es muy larga, y el pasado 30 de abril incorporaba una línea más con el enlace de Ramón Hermosilla, hijo de Silvia Gómez-Cuétara, y la chef Karla Covarrubias. Para la celebración, que tuvo lugar en Ciudad de México, la novia escogió un dos piezas en color champagne y una elaborada mantilla en vez del velo. Se alejaba así del look nupcial clásico, igual que, además de la tradicional alianza, quiso contar con un anillo que se conoce como "churumbela" y que Suarez creó a medida para la ocasión.

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Aunque la historia marca que la churumbela se regala en el nacimiento de un hijo o en la celebración del aniversario de matrimonio, cada vez son más las novias que prefieren este anillo decorado con diamantes o piedras preciosas como recuerdo de su boda. La cocinera mexicana Karla Covarrubias ha sido una de ellas, y confió en la casa de origen bilbaíno Suarez para crear la joya. La línea Sur mesure de esta reconocida casa ofrece a las novias la posibilidad de idear, junto al equipo creativo liderado por Benito Suárez, sus propias piezas, y así lo hizo Karla, que trabajó mano a mano con la diseñadora Sandra Rojo.

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"Karla llego al taller emocionada, quería desde el principio que Suarez diseñara su churumbela, una joya a única hecha a medida que pudiera llevar siempre. La churumbela es la pieza que se coloca entre el anillo de pedida y la alianza. Para hacer contraste con las piezas que iba a llevar, la churumbela se realizó en oro y se dio un baño de rodio al oro blanco para dar un tono envejecido", explican desde la firma. El resultado de esta colaboración es una churumbela de oro amarillo de 18 quilates, con brazos y garras en oro blanco, y nueve diamantes talla brillante.

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"Era todo y más de lo que quería" , ha dicho Karla sobre esta joya personalizada que, gracias a su sencillez y elegancia, podrá llevar en cualquier ocasión. Antes que ella, otras novias de referencia como Lucía Bárcena o María Fernández-Rubíes confiaron en Suarez para crear sus joyas nupciales. Y es que el largo recorrido del proyecto Sur mesure -lanzado en 1943 y con más de 4.500 diseños únicos en su historia- asegura que la pieza sea perfecta para completar el look en un día tan especial... y también para recordarlo siempre.

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