Helena Christensen, la supermodelo que se convirtió en dama de honor

La top model danesa formó parte del cortejo nupcial de una de sus mejores amigas y se saltó el protocolo tradicional llevando un vestido blanco, como ya hicieron Pippa Middleton o Cara Delevingne

Por María Calvo

Fue el pasado mes de agosto cuando todas las miradas se dirigieron a Copenhague. Allí donde las nórdicas nos inspiran a diario con sus irreverentes looks, se casaba una conocida modelo e influencer danesa. La boda de Caroline Brasch y el chef Frederik Bill Brahe fue el preludio de una lluvia de likes que consiguió hacer de la novia la imagen más viral de las redes sociales, gracias al abrigo de leopardo con el que completó su look nupcial. Su vestido, al igual que el de las damas de honor, fue obra de Cecilie Brahsen, la diseñadora que meses después nos descubre a través de Instagram el look de uno de los rostros más celébres que acudió a esta idílica cita: Helena Christensen.

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La supermodelo de los 90, gran amiga de la pareja y nacida también en Copenhague, fue una de las elegidas para componer el cortejo nupcial de la novia. La propia Helena dio buena cuenta de ello a través de las stories de su Instagram pero, hasta ahora, no habíamos podido ver con detalle su vestido de dama de honor. La diseñadora nórdica Cecilie Bahnsen es conocida por recrear diseños de ensueño que, sin estar destinados específicamente al terreno bridal, se convierten en opciones ideales para aquellas mujeres que estén planeando casarse, especialemente si es por lo civil. En esta boda, además, nos hemos dado cuenta que sus creaciones también encajan perfectamente en un romántico elenco de damas de honor. Su última colección prêt-à-porter está repleta de texturas únicas que siguen una línea escultórica y muy femenina, tal y como podemos comprobar en el look de la top.

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Se trata de una propuesta Pre-Fall 2018 que apuesta por las formas sinuosas y suaves con el color blanco como protagonista. Sus mangas abullonadas, esa textura de boatiné, la silueta aniñada del vestido y unas margaritas en el pelo, se mimetizaban con la atmósfera bucólica y especial que crearon los novios en su boda. Tan especial que la novia y sus damas de honor llegaron en barca al altar. El hecho de que muchas de ellas eligieran vestir de blanco podría suponer una falta al protocolo más tradicional. Sin embargo, tal y como ocurrió con la pionera Pippa Middleton en la boda de la duquesa de Cambridge o con Cara Delevingne en la de su hermana Poppy, parece que, lejos de rivalizar con el traje de la novia, contribuye a reforzar el lazo entre la protagonista del evento y su cortejo nupcial.

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Y es que todo fue diferente en esta boda. Hasta ahora, casarse con un abrigo de leopardo había sido algo poco común, pero tuvo que llegar ella para dar un paso adelante en el terreno bridal. El look que publicó Caroline Brasch en sus redes sociales se posicionó al momento como la tendencia a seguir en temporada invernal. Con una copa de vino en la mano y caminando por los canales de Copenhague junto a su marido, la danesa nos recordó que ser original cuesta tan poco como añadir una de las prendas más comunes de tu armario a tu vestido de novia.