Paul McCartney y Heather Mills vuelven a verse las caras por el bien de su hija

La modelo llevó a la pequeña Beatrice a un aparcamiento de Nueva York donde el cantante la esperaba

Por hola.com

Después de un amargo proceso de divorcio que se extiende ya dieciocho meses, Paul McCartney y Heather Mills parecen haber enterrado definitivamente el hacha de guerra. Al menos eso es lo que se desprende del encuentro, sin abogados de por medio, que ambos mantuvieron este fin de semana. El músico fue a recoger a Beatrice, su hija de tres meses, como parte del acuerdo de custodia compartida al que ambos han llegado.

El encuentro, que se prolongó durante escasos dos minutos, se produjo en el aparcamiento de una estación de tren en Nueva York. Es en esta ciudad, en un enclave de moda en Hamptons junto al río, donde el cantante reside. Aunque Paul y Heather mantuvieron la compostura en todo momento y supieron guardar las distancias, la pequeña Beatrice no pudo reprimir la alegría al ver a su padre y gritó al verle: "Papi, papi, papi". El único momento de tensión se produjo cuando la niña, en brazos del ex Beatle, acercó a sus padres al llevar uno de sus brazos al cuello de su madre para despedirse de ella.

La niña venía de un salón de belleza al que su madre la había llevado para ponerla guapa antes de entregársela a su padre. Pero no sólo fue Beatrice la que pasó por la peluquería. También Heather, que eligió un veraniego vestido de vivos colores, quiso estar lo mejor posible para su encuentro con su ex marido.

Beatrice, la razón de la tregua
El divorcio entre el músico, de 65 años, y la modelo, de 39, comenzó en mayo del año pasado y el proceso desde entonces no ha estado exento de polémica. Una serie de acusaciones vertidas por ella hacia Paul acusándole de alcohólico y maltratador llegaron a su fin cuando, el pasado mes de mayo, la pareja decidió llegar a una tregua por el bien de su hija. Y es que, según comentó entonces el músico en una entrevista publicada en la revista The Guardian, "mi preciosa hija es lo mejor que ha salido de nuestro matrimonio, aunque este no haya funcionado". Según las últimas informaciones ofrecidas por la prensa inglesa, la pareja habría llegado a un acuerdo según el cual Paul deberá pagar a Heather un total de 103 millones de euros, hasta que Beatrice cumpla 18 años.