Londres, y no París o Venecia, es la ciudad del amor para Joaquín Cortés y Marisa Jara, y tan románticos días han disfrutado en la capital británica que incluso podrían sonar campanas de boda para la guapa modelo y el cotizado soltero. La escapada de Joaquín y Marisa no ha pasado tan inadvertida como les hubiera gustado, y si la semana pasada les veíamos haciendo turismo por las zonas más céntricas, esta semana les mostramos cómo dedicaron gran parte del tiempo a ir de compras, que para algo Londres es el paraíso del shopping. Eso sí, aunque no se dedicaron sólo a los caprichos personales e hicieron hueco para comprar ropa de hogar.
La pareja estuvo cerca de dos horas en el departamento de hogar de la tienda que Ralph Lauren tiene en el exclusivo barrio de Notting Hill comprando ropa, quizá para la casa que pudieran estar pensando en compartir. Salieron cargados de bolsas, contentos con sus nuevas adquisiciones, y él, todo un caballero, se encargó de acarrear las grandes y pesadas, mientras que Marisa llevaba las más pequeñas.
El anillo de Marisa Claro que si sorprendió su visita común a la tienda de ropa de hogar, lo que no pasó inadvertido es el anillo que Marisa lleva en el dedo anular de la mano izquierda. Un solitario montado en oro blanco que podría ser su sortija de prometida y que no lucía en los primeros días de su estancia en Londres. Después, pasearon como dos turistas más o… casi, porque ellos no se detuvieron frente a las tiendas de souvenirs, sino delante de un escaparate en el que se mostraban distintos tipos de tarjetas para invitaciones. ¿Será que en la ciudad del Támesis se han hecho la promesa de amor?
De ser así, estaríamos ante la confirmación de que el bailarín español más internacional ha decidido dejar atrás los romances de vértigo y sentar la cabeza a los treinta y siete años y que quien lo ha conseguido es la bella Marisa Jara, de veinticinco. Porque si a él se le han conocido noviazgos fugaces fuera y dentro de nuestras fronteras, a ella sólo la hemos conocido junto al cantante Manu Tenorio. Estuvieron juntos cuatro años, llegaron a pensar en boda y hablaban de tener hijos, aunque últimamente —hace unos meses— conocíamos el final de su relación. Ahora, Marisa, desde hace unas semanas, escribe su futuro junto a Joaquín Cortés.
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