Hace poco más de un par de años que las sudaderas comenzaron a ser una de nuestras prendas estrella del armario. Desde que las firmas de lujo nos enseñaran en pasarelas que eran aptas para para acompañarnos 24/7, no hemos hecho más que verlas en los looks que más admiramos del street-style. Los motivos son claros: son cómodas, abrigan y, además, tal y como podemos ver en los estilismos que más nos cautivan de las consultoras de moda, sientan bien con una infinidad de piezas con las que nunca antes las habríamos imaginado combinar. Ya no son solo acompañantes ideales para estar por casa, para ir al gimnasio o para abrigarnos después de una jornada de playa, sino que ahora también son una de las apuestas más estilosas para acompañar nuestros looks de oficina, los de ir a clase e incluso, también, los más originales para acudir a cualquier evento. Si a ti todavía te cuesta llevarlas, sigue leyendo. A continuación te demostramos por qué las sudaderas no son un gasto, sino, más bien, toda una inversión.
- Ropa muy estilosa y cómoda para tu vuelta a la oficina