Cuando quedan apenas un par de días para que comience el icónico Festival de Cine de Venecia, la ciudad de los canales ya ha acaparado numerosos titulares en todo el mundo gracias a Dolce&Gabbana. Los diseñadores han elegido estratégicamente este enclave para su celebración de la Alta Moda (y Alta Joyería), en la cual han presentado sobre la pasarela sus piezas más exclusivas y han disfrutado de varias citas con algunas de sus embajadoras más populares. La primera en aterrizar en la capital italiana fue Kitty Spencer, quien ha protagonizado una auténtica maratón de estilo este fin de semana. Sin embargo, el gran look viral del evento llegó de la mano de Jennifer Lopez, quien dejó claro una vez más que es la reina del maximalismo.
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Cambio de registro
No hay duda de que Jennifer es una de las mujeres del momento, y está en boca de todos no solo por su imparable carrera profesional sino también por su relación con Ben Affleck 17 años después de su ruptura, una reconciliación que tiene enamorados a sus fans más nostálgicos.
En los últimos días hemos visto a la pareja mimetizar incluso sus looks, en los que la cantante optaba por diseños sencillos compuestos a base de prendas sofisticadas y atemporales de fondo de armario. Sin embargo, para su aparición estelar en Venecia ha querido hacer un cambio absoluto de registro y recuperar su imagen más maximalista por todo lo alto con un estilismo que no ha dejado indiferente a nadie.
Oda al 'más es más'
Si algo caracteriza a la famosa firma italiana es su maximalismo, su explosión de estampados y sus diseños barrocos. Jennifer ha querido homenajear esta estética y ha elegido un recargado conjunto que mira hacia el otoño, protagonizado por un corsé-joya cuajado de pedrería y unos pantalones estilo carrot de tiro alto confeccionados en un tejido oscuro con flores brocadas. Si ya de por sí estas dos piezas eran capaces de dejarnos boquiabiertas, ha querido ir un paso más allá al agregar una teatral capa en tono verde esmeralda, un diseño de hombros estructurados adornado también con motivos botánicos, cenefas bordadas y grandes botones. Para rematar, se ha subido a unas sandalias de plataforma XL doradas con pulsera al tobillo y multitud de abalorios y perlas engarzadas.
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Joyería en clave XL
Dolce&Gabbana siempre ha incluido entre sus colecciones reminiscencias a la estética religiosa, inspirándose en imágenes de la virgen o en los famosos mosaicos bizantinos de pan de oro, motivo por el que no sorprende que Jlo haya elegido prendas y complementos que siguen esa corriente. Ha completado su recogido con una corona de flores metalizadas que, una vez más, respira esa grandilocuencia. Además, ha sumado también maxipendientes y anillos decorados con grandes gemas verdes y marrones, pertenecientes a la línea de Alta Joyería que se ha presentado estos días.
Amor por el brilli-brilli
La artista (y su gran equipo de estilistas) ha cuidado hasta el más absoluto detalle, incluyendo la manicura en tonos naturales que casa a la perfección con el bolsito, una pieza de mano repleta de pequeños cristales dorados y adornada con un corazón con las iniciales de la firma.
Mejor a los 50 que a los 30
En cuanto al look de belleza, ha vuelto a impactar con su piel bronceada y jugosa, con un efecto glowy de lo más favorecedor conseguido con los productos de su propia firma de cosmética: Jlo Beauty. Ha potenciado su mirada con un ahumado oscuro, pestañas infinitas y cejas marcadas, y ha completado con un labial nude de acabado brillante. Ha recogido su melena rizada en un moño alto en clave messy, con mechones sueltos que enmarcaban el rostro.