Puede que el vestido rojo con el que Vivian Ward acude a la ópera no llegara a pisar nunca la alfombra roja. La estilista de la película, Marilyn Vance, fue la encargada de crear el que es ya uno de los diseños más icónicos del cine. Sin embargo, la fascinación por los vestidos rojos con hombros caídos, como el que lució Julia Roberts, siguen apareciendo en las grandes galas.