En pleno siglo XXI, usamos la gabardina sin más finalidad que ir en tendencia mientras nos protegemos protegernos del frío, pero esta prenda tiene sus orígenes en los uniformes militares para los días lluviosos. De hecho, su nombre en inglés (la palabra trench) viene de las trincheras de la Primera Guerra Mundial. Poco tardó la casa británica Burberry en lanzar su propia edición de esta prenda de abrigo waterproof destinada para las mujeres prácticas y estilosas. Un siglo más tarde, se trata de una pieza tan versátil que puede llevarse con casi cualquier sector del armario ¡incluso sobre un conjunto de chándal! Aquí te proponemos cinco formas innovadoras para que saques provecho a tu gabardina clásica.
