El noviazgo de Heidi Klum con Tom Kaulitz, el guitarrista de la banda musical Tokio Hotel, se dio a conocer en marzo de 2018 tras confirmar su relación con un beso fortuito durante el rodaje de un programa de televisión. Un año después, el 22 de febrero, la pareja contraía matrimonio en secreto en una ceremonia intima. Este fin de semana junto a familiares y amigos, ambos han querido festejar su unión en Capri con una segunda boda, que acontenció en la cubierta de un barco. Un momento que nos permitió ver a la modelo espectacular con un vestido con grandes volúmenes y flores en relieve. Sin embargo, este no fue el único acontecimiento en el que vimos a la novia vestir de blanco, pues este ha sido el color que ha dominado su maleta de viaje en la que encontramos su estilismo de preboda y varias elecciones para las celebraciones posteriores, entre las que no faltó un sugerente bañador 'nupcial' que recordó su etapa como ángel de Victoria's Secret.
Fiestas en el barco o en la playa (y mil y un beso a su marido), Heidi Klum ha querido que su imagen estos últimas días sea completamente en color blanco, haciendo un guiño a tan significativo momento en la historia de su relación con Tom Kaulitz. Para la celebración postboda, optó por un vestido de algodón con calados y estética sesentera. Una imagen desenfada que, no obstante, le hacía lucir maravillosa.
Esta creación mostraba un favorecedor escote en halter. Una tendencia que también fue la que acompañaba a su traje de baño. Para darse un chapuzón, Heidi se decantó por una creación de Melissa Odabash. Concretamente, es un bañador elástico en color blanco que, además, incorpora un anudado en la cintura y que recibe el nombre de modelo Tahití (276 euros).
