Con motivo de la celebración del National Day of Prayer en el Rose Garden de la Casa Blanca (Washington DC), Melania e Ivanka Trump han vuelto a coincidir. Nuevo duelo de estilo entre la Primera Dama y la hija mayor del presidente de Estados Unidos que, en esta ocasión, no capta la atención solo por presentar looks de tendencias muy diferentes, sino porque, curiosamente, estas elecciones recuerdan a los gustos que seducen a dos mujeres de la realeza británica, Kate Middleton y Meghan Markle.
Para la ocasión, Melania Trump apuesta por un vestido que encuentra referente en la elección que la duquesa de Cambridge llevó un día antes en Londres y que se convirtió en apuesta anecdótica. En color verde y largo midi, Kate optó por un vestido de Emilia Wickstead que ya figura como uno de sus favoritos, pues lo tiene exactamente igual, aunque en otra tonalidad.
No solo por ser verde, la elección de Melania Trump también encuentra referente en Kate al pertenecer a la firma Emilia Wickstead. Recrea un corte similar, aunque prefiere combinarlo de forma más atrevida. Mientras que la duquesa de Cambridge lo acompaña de complementos en tono nude, una elección con la que siempre acierta, la primera dama de Estados Unidos prefiere contrastar su vestido con un cinturón fino en tono un poco más oscuro y unos salones con llamativo estampado floral, modelo So Kate de Christian Louboutin.
Ivanka Trump tampoco quiso perderse el servicio ofrecido con motivo del National Day of Prayer. En su caso, prefirió la comodidad de un vestido camisero en color azul claro, de largo midi y con cinta anudada la cintura, capaz de adaptar fácilmente el diseño a cuerpos muy diferentes. Una favorecedora elección que, por su parte, vuelve a conectar con la realeza y que, en concreto, tiene como referente uno de los primeros looks premamá de Meghan Markle.
La duquesa de Sussex llevó un diseño muy similar durante uno de los actos de su viaje oficial por Oceanía: la inauguración del Pabellón The Queen's Commonwealth en el Tupou College, de Tonga. Concretamente, encontraba su vestido camisero con lazada (detalle ideal para que se adaptaba a la perfección a su recién estrenada silueta premamá) en el modelo Cary de Veronica Beard. Lo acompañó de zapatos destalonados de Banana Republic y pendientes de Adina Reyter.
