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A los 24 años, si todo va bien, se encuentra un primer trabajo estable, procuras ahorrar para organizar un gran viaje con amigas o, si eres amante de la moda, comienzas a invertir en prendas y accesorios de calidad que conformen un fondo de armario único. María Pombo, que cumplirá 25 años el próximo 17 de octubre, es una chica atípica y su vida poco tiene que ver con la del resto de personas de su edad. Y puede que esa sea una de las razones de su éxito como influencer. Pero, a pesar de contar con su propia empresa de ropa y colaborar con las firmas de moda y belleza más influyentes, esta madrileña con rasgos de californiana (melena rubia, ojos verdes y piel bronceada) irradia naturalidad en cada uno de sus vídeos y publicaciones. Más de un millón de personas la siguen cada día y a pocas semanas de celebrarse su boda con Pablo Castellano, su pareja desde hace casi tres años y con quien se dará el sí, quiero el próximo 22 de junio, el interés que genera no para de aumentar. Pero, ¿cómo ha logrado María Pombo hacer de su nombre su marca?
“Nunca jamás compares tu felicidad, tu cuerpo, tus relaciones, ni tus metas en la vida, con nadie y menos en Instagram”, se puede leer en la biografía de la madrileña. Este mantra refleja mucho de la personalidad de María, que se muestra auténtica y sin artificios logrando conectar con su público, que en cada post deja centenares de comentarios y una lluvia de likes que se cuenta por miles. Según Luis Díaz, CEO de la agencia especializada en marketing de influencers Human to Human, la autenticidad es precisamente una de las claves para lograr el éxito: "El primer paso pasa por conocerte bien a ti mismo, la autenticidad es muy importante ya que una marca personal tiene que estar basada en una realidad. Tienes que saber quién eres realmente y qué te hace diferente del resto". Aun manteniendo lo que la diferencia del resto, el perfil de Instagram de María Pombo comparte algunas similitudes con el de algunas de las influencers más poderosas de la industria. María, como la italiana Chiara Ferragni, muestra no solo sus conjuntos, sus campañas y sus viajes de trabajo, también hace partícipes a sus seguidores de algunos aspectos de su vida personal. Como si fuera un reality –en pequeñas dosis y sin guion- los seguidores de María pueden entrar a formar parte de su vida, al menos de manera digital, conociendo, por ejemplo, cómo fue el momento en que se comprometió con su pareja (lo explicó en un vídeo de YouTube que suma más de medio millón de reproducciones), las obras de la nueva casa que está construyendo con su futuro marido o sus viajes en familia junto a sus hermanas Marta (que también se casará este año) y Lucía. Por cierto, Chiara también tiene dos hermanas, una de ellas –Valentina- convertida en prescriptora de estilo. En opinión de Díaz "está bien mirar a las grandes influencers internacionales, pero hay que pensar: ¿qué aporto yo a las personas que me siguen que no lo pueden encontrar en ninguna otra influencer?". La respuesta a esta compleja pregunta está escrita en el feed de María Pombo.
A la hora de hablar de moda, puede resultar complicado encontrar una única fuente de inspiración. Algunos estilismos de María nos recuerdan al boho de la prescriporta de estilo estadounidense Rocky Barnes, otros al estilo depurado de Olivia Palermo y los más cañeros al de las diseñadoras e influencers italianas Gilda Ambrosio y Giorgia Tordini, fundadoras de la firma The Attico, que Pombo sigue en redes. Aunque la moda está muy presente en su feed, la industria de la belleza también llama la atención de María Pombo y le ha ayudado a ganarse a esos followers interesados en el mundo del maquillaje y los cosméticos. Un mundo que ha dado grandes alegrías a influencers como Kylie Jenner, que gracias a su firma de belleza homónima logró convertirse en la multimillonaria más jóven hecha a sí misma, según Forbes. De momento, María no ha lanzado su propia marca beauty pero muchas de sus publicaciones hacen alusión a sus cosméticos preferidos y en su canal de YouTube abundan los tutoriales de peinados y looks de maquillaje. Lo que sí ha tomado como referencia María de la mediática familia Kardashian es su apellido, convertido en marca, y es que ella y sus hermanas recurren a un juego de palabras y se hacen llamar las Pomboshian, un guiño que demuestra la influencia del klan.
El hecho de diversificar sus publicaciones, algo puesto en práctica por las más influyentes a nivel mundial, y crear contenido que pueda interesar a las amantes de la moda, pero también a las adictas a la belleza, los viajes o el fitness, le ha permitido multiplicar sus seguidores y destacar por encima de otras compañeras de profesión que están más ligadas a un sector concreto. Además, la vertiente personal también interesa, y mucho, y María ha conseguido el equilibrio perfecto dando a conocer su lado profesional -con post pagados, campañas o editoriales en revistas- pero también compartiendo momentos importantes de su vida privada. Un aspecto que ha influido en gran medida en su éxito, según el experto en marketing de influencers Luis Díaz: "María Pombo ha triunfado porque tiene un posicionamiento como marca muy claro y diferente a otras influencers. Conecta muy bien con sus seguidores en el plano emocional gracias a sus dotes de comunicación y a que hace a sus seguidores partícipes de su vida diaria. No tiene miedo a enseñar su día a día y ser una “amiga” más de sus seguidores. Por ejemplo, el otro día estuvo comiendo con sus amigos María y Tomás, esto lo sabemos todos los que seguimos a María. Sin embargo, no sé con quién comieron ayer la mayor parte de mis amigos. Conocemos a Papín, Pablis, Gabi, Pluto, a sus primas las Pombitos, su familia americana… todo su universo forma parte del nuestro como seguidores y esta relación nos aporta valor, de una manera u otra".
Su relación con Pablo también ha sido seguida desde el primer momento por su creciente legión de fans, que han sido testigos también de la organización de su boda. Chiara Ferragni hizo de su boda todo un acontecimiento que traspasó las barreras digitales logrando incluso mayor atención que el enlace de Meghan Markle y el Príncipe Harry (fueron tres millones de personas las que vivieron su romántico enlace a través de sus móviles. Una cifra que superó los 2,3 millones de españoles que vieron la boda de los Duques de Sussex). De momento, habrá que esperar al enlace de María y Pablo para saber cuánto podrán ver sus seguidores si bien todo apunta a que la esperada celebración será uno de los acontecimientos del verano.
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