Tan solo una semana después de viajar a Surinam, los reyes Guillermo Alejandro y Máxima de los Países Bajos continúan con su intensa agenda internacional, aunque, esta vez, les ha tocado ejercer como anfitriones con el objetivo de reforzar la cooperación cultural, económica y social con Finlandia. Alexander Stubb, presidente del país nórdico, aterrizó ayer en Ámsterdam junto a su mujer, la primera dama Suzanne Innes-Stubb, e inmediatamente, comenzaron una apretada jornada de actos oficiales que culminó con una cena de gala en palacio. Tanto en estas citas como en las que han tenido lugar hoy, Suzanne nos ha sorprendido con sus looks, derrochando estilazo y coronándose como icono de moda.
Esta mañana ha elegido un impecable traje de chaqueta en tono nude, un dos piezas compuesto por una blazer entallada, bolsillos frontales y botones metalizados y pantalón recto a juego. Ha completado con unos salones negros y bolsito de mano de asa corta en el mismo color, así como unos pendientes de piedras transparentes.
Para el banquete organizado en su honor anoche, Suzanne eligió un precioso vestido satinado en tono aceite, un diseño de escote asimétrico con una manga larga acampanada, falda hasta el suelo y cuerpo ceñido drapeado que realzaba su figura. Se trata de una favorecedora prenda ideada para favorecer a todo tipo de cuerpos, la cual ya habíamos visto anteriormente puesto que la llevó también en el Palacio Real de Estocolmo durante un viaje a Suecia en abril de 2024. Para darle un aire diferente al del año pasado, cambió radicalmente de peinado y, en lugar de recoger su melena oscura en un moño bajo, la dejó suelta, peinada con raya al lado y ondas marcadas.
En su primer encuentro con los reyes de Países Bajos por la mañana, que tuvo lugar en el Monumento Nacional de la Plaza Dam, Suzanne mostró su imagen más clásica y elegante con un estilismo a la altura de las reinas y princesas europeas. Apostando por la sofisticación eterna, escogió un traje de chaqueta y falda midi confeccionado en un tejido de tweed en tono crudo, una opción perfecta para estas fechas.
Para protegerse del frío, le sumó una capita corta en la misma gama y tocado lateral a juego, similar al que lució Máxima. Optó por un elaborado moño para aportar una imagen más atemporal y formal, y remató con unos salones oscuros de puntera afilada y tacón chupete.
Las primeras damas europeas, nuevos iconos de moda
La cantidad de viajes de Estado que han tenido lugar en las últimas semanas nos ha traído una serie de descubrimientos de mujeres estilosas a las que seguir la pista. Además de Suzanne Innes-Stubb, también ha entrado en nuestro radar Elke Büdenbender, quien se ha posicionado como una de las figuras políticas mejor vestidas del panorama. Esta jurista es la esposa de Frank-Walter Steinmeier, presidente de Alemania, a quien ha acompañado en sus últimas visitas a España y Reino Unido.
En la cena de gala organizada en Windsor por los reyes de Inglaterra la semana pasada en su honor rindió homenaje a Kate Middleton con un impresionante vestido de terciopelo verde de Talbot Runhof, una pieza bautizada como tolga17 (1.698 euros). Según sus creadores, es un diseño "elegante, a la vez que define la figura y es sexy, glamuroso y brillante, pero increíblemente cómodo. Moderno, pero un clásico atemporal. Además, gracias a la elasticidad adicional, el material se adapta a la perfección a la silueta y acentúa las curvas femeninas sin apretar".
Este precioso look, rematado por unos puños XL, generó numerosos titulares en todo el mundo, al igual que lo hiciera el que llevó durante el banquete en el Palacio Real de Madrid a finales de noviembre, una imponente creación azul con cuello redondo, manga larga y falda acampanada que guardaba gran similitud con el vestido de gala de The 2nd Skin Co. que tiene la reina Letizia.
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